Irán solicita la retirada simultánea de las fuerzas de ambos bandos

Alto el fuego Inmediato, fin del embargo de alimentos y medicinas y retirada simultánea de las fuerzas de ambos contendientes son los puntos más destacados de un nuevo plan de paz para el Golfo, lanzado ayer por el presidente del Parlamento iraní (Majlis), Mahdl Karrubi. La República Islámica, que se ha declarado neutral ante la guerra que libra su vecino Irak contra una alianza de 28 países, se ha visto indirectamente implicada con el aterrizaje en su territorio de una veintena de aviones iraquíes, que ha prometido no devolver hasta que concluya el conflicto.Karrubí asegura que su iniciativa representa una mera "postura personal", pero en su exposición a la prensa ayer dijo que la ha comunicado a otros Parlamentos. El proyecto del presidente del Majlis prevé además que los contendientes sean sustituidos, tanto en Arabla Saudi como en Kuwait, por fuerzas de los ejércitos de países islámicos. A continuación, un comité que agrupe a éstos controlaría la puesta en marcha de los cuatro puntos precedentes, y actuaría de árbitro para el arreglo de las diferencias entre Irak y Kuwait.

Por último, y es el apartado más complicado del plan, se frenaría "sin condiciones la inmigración de judíos a Palestina" y se crearía "un comité de países islámicos para apoyar las luchas para la liberación de la nación palestina, sobre todo el territorio de la Palestina ocupada". El lenguaje en el que está redactado este quinto punto tiene algo de concesión a Irak, en lo que este país presenta ijorno su principal reclamación; ahora bien, requeriría, para ponerse en marcha, el apoyo de algunos Gobiernos que no se encuentran, en principio, en el ámbito de los amigos de la república islámica.

Con todo, el hecho de que Irán sea uno de los miembros más destacados tanto de la Organización de la Conferencia Islámica (OCI) como del Movimiento de Países No Alineados, que ha anunciado una reunión de sus ministros de Asuntos Exteriores para el próximo mes, permite otorgar interés al plan del dignatario iraní.

Ayuda alimentaria a Irak

De momento, las autoridades de Teherán han decidido otorgar una ayuda alimentarla al pueblo iraquí, y para ello encargaron el pasado Fin de semana a la Media Luna Roja de Irán que adoptara las disposiciones oportunas. El Consejo Superior de Seguridad Nacional, la más alta instancia política de la república, justificó la medida, "habida cuenta de la difícil situación provocada por la guerra en Irak y la falta de víveres y de medicamentos".

De alguna forma, con este anuncio se compensa, ante la opinión pública iraní, la actitud de estricta neutralidad adoptada por su presidente, Hachemi Rafsanyan frente a los sectores que reclamaban su entrada en la guerra "al lado de los hermanos musulmanes" y frente a EE UU.