Acuerdo entre las milicias croatas y el Ejército yugoslavo
El presidente croata, Franjo Tudjman, acordó desmovilizar, ayer a mediodía, a miles de reservistas de la policía croata, puestos en estado de alerta ante una posible intervención militar, a la vez que las Fuerzas Armadas yugoslavas accedieron, también ayer a mediodía, a disminuir la alerta en los cuarteles militares en Croacia. Este acuerdo evitó el abismo de la guerra civil que se cernía en Croacia.Esta decisión se tomó tras la reunión de urgencia de la Presidencia yugoslava, que duró hasta altas horas de la noche del viernes, tras la orden de las Fuerzas Armadas yugoslavas de desmovilización de los grupos paramilitares croatas y la negativa de las autoridades republicanas a poner en marcha esta orden.
Simultáneamente, mientras la cúpula política y militar del país balcánico analizaba la situación crítica en el país y centenares de miles de croatas pasaban la noche en vilo temiendo la intervención militar, las Fuerzas Armadas transmitieron el viernes por la noche, a la hora de máxima audiencia, una película preparada en secreto que reveló cómo los ministros de Interior de Croacia, Josip Boljkovac, y de Defensa, el general jubilado Martin Spegelj, habían preparado un plan de liquidación de los oficiales de las Fuerzas Armadas y de sus familias residentes en Croacia.
Asimismo, el documental informó que Martin Spegelj y el ex ministro de Exteriores croata, Zdravko Mrsic, viajaron secretamente a Hungría para comprar miles de fusiles Kaláshnikov.
La película suscitó indignación y terror entre la población yugoslava. Sólo la televisión croata rehusó retransmitirla, a la vez que el ministro Spegelj desmintió la veracidad de los documentos filmados.
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