El tráfico de Amsterdam
En respuesta a la carta publicada el pasado 10 de enero por el señor Borges, y como asiduo visitante de Amsterdam, me permito significarle que el centro de Amsterdam no está, ni ha estado nunca, cerrado al tráfico privado.Por otro lado, y respecto a la alabada convivencia de peatones, tranvías, metro, trenes, autobuses, bicicletas y coches en esa hermosa ciudad holandesa, creo no pecar de exagerado al calificarla de caótica y sobre todo azarosa por el continuo riesgo de atropello y colisión existentes.
Yo también lamento (como víctima diaria suya que soy) la penosa situación de la ordenación del tráfico en Madrid, pero creo que resulta demasiado fácil recurrir a la comparación con el maravilloso extranjero como solución a nuestros problemas.
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