Protagonista, el coche
Soy un enamorado de una de las ciudades más fascinantes de Europa, Amsterdarri, y por más tiempo que paso allí no deja de asombrarme como en esa ciudad de 88 canales pueden convivir peatones, tranvías, metro, trenes, autobuses, bicicletas a tutiplén y, por último, coches . Sin embargo, a mi otra ciudad preferida, la gran villa de Madrid, la encuentro a mi regreso navideño invadida por un nuevo y definitivo, protagonista: el automóvil. Mi mayor sorpresa se produce al leer que existe una fuerte oposición a peatonizar el centro de Madrid, lo que, de alguna manera, significa humanizar esta ciudad si se le añade un incremento en el transporte público y la construcción de más garajes públicos para que los coches no invadan tanto la ciudad. ¿Acaso parece rara esta medida tan lógica? .
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