15 alcaldes de IU amenazan con la firma masiva de peonadas falsas a partir de mayo

Los 15 alcaldes de Izquierda Unida (IU) en Málaga anunciaron ayer su intención de firmar peonadas falsas a partir del próximo mayo -mes en el que está prevista la celebración de elecciones municipales- si el Gobierno no modifica el actual sistema del PER. Por su parte, el PSOE de Granada sigue creyendo en la necesidad de reformar la normativa que regula el cobro del subsidio agrario, aunque estima que el Ministerio de Trabajo no acometerá ninguna modificación durante 1991.

En una nota conjunta con motivo del encierro de cargos públicos de IU en la Diputación de Málaga, que estaba previsto que concluyese anoche, la coalición justifica la decisión de sus ediles en "la necesidad de aliviar la penosa situación por la que atraviesan miles de familias humildes del medio rural".El diputado nacional Antonio Romero indicó que la Junta "sólo invirtió el pasado año 1.400 millones de pesetas en la formación de jóvenes en las zonas rurales de la comunidad autónoma", mientras que ellos estiman que serían necesarios 9.000 millones de pesetas por este concepto para facilitar cursos de formación por un periodo de seis meses a 30.000 jóvenes andaluces.

Éste ha sido uno de los "ejes básicos" manejados por esta formación, que ha elaborado un documento alternativo al PER en el que se contempla "el rechazo a la exigencia de las 60 peonadas" para percibir el subsidio agrario.

A partir de] mes de enero, dirigentes de la comisión política de IU recorrerán 60 municipios de Málaga para celebrar asambleas con la participación de los jornaleros, en las que no se descartan nuevos encierros, fundamentalmente en la comarca de Antequera (Málaga).

Por su parte, el secretario de Política Municipal del PSOE en Granada, Carlos Martínez, aseguró ayer que si se depurase el censo agrario de Granada los fondos destinados al PER serían suficientes para garantizar las sesenta peonadas. Los socialistas granadinos son partidarios de que se haga un estudio de cada una de las comarcas de la provincia y, de acuerdo con sus posibilidades de empleo, se fije cuántas son las jornadas mínimas que los braceros han de justificar para acceder al subsidio.