Surgen nuevos elementos para la incertidumbre
La inesperada dimisión del ministro de Asuntos Exteriores soviético, Edvard Shevardnadze, produjo una reacción bajista en los mercados bursátiles internacionales ya que añade un nuevo elemento de incertidumbre a un panorama geopolítico internacional, ya de por sí muy complicado. Si bien la dificil situación en la que se encuentra la Unión Soviética lleva tiempo incubándose la comunidad inversora internacional, no le había dado hasta ahora la importancia debida ya que toda la atención se encontraba centrada en el Golfo Pérsico. En opinión de los analistas cualquier empeoramiento de la situación en la URSS podría afectar de forma muy negativa a las bolsas europeas y especialmente a la alemana. Por el contrario, los mercados financieros norteamericanos se beneficiarían, ya que podría producirse un trasvase del dinero inversor desde Europa a EEUU.En este contexto, la Bolsa de Francfort cedió un 3,3%, al tiempo que la de París perdía un 2,3%. Por su parte, la Bolsa de Londres conseguía mantenerse más estable, perdiendo sólo un 0,9%. Mientras, en los mercados de di visas el dólar se fortaleció gracias al rol de moneda refugio que ostenta. Las noticias respecto a un recorte del Prime Rate por parte de los principales bancos norteamericanos no causó impacto alguno ya que en estos momentos la evolución del dólar no se rige por los fundamentos económicos sino más bien por los acontecimientos geopolíticos.
Por su parte, la Bolsa de Nueva York, que comenzó con una baja de 30 puntos, cerró la sesión con un saldo positivo de 2,73 puntos y llegar a 2.629 puntos, reafirmándose así la impresión de los analistas internacionales respecto al posible trasvase de fondos de Europa a los Estados Unidos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.