La estación Sur de autobuses le costará a la Comunidad 800 millones más de lo previsto

El edificio de la futura estación Sur de autobuses, en la calle de Méndez Álvaro, va a costar 800 millones más de lo previsto, según los primeros cálculos de la Comunidad. Un nuevo proyecto subsana las limitaciones del planeamiento municipal en los accesos a la terminal, en cuyas inmediaciones se alzará un gran centro comercial. Pero el Ayuntamiento achaca el desaguisado al proyecto inicial, y no a su plan urbanístico.

La construcción de la estación Sur de autobuses ha reavivado el enfrentamiento urbanístico entre la Comunidad y el Ayuntamiento. Ambos organismos se culpan recíprocamente del sobrecoste de las obras, que pueden pasar de los 2.000 millones de pesetas previstos, a 2.800 millones. Fuentes de la Consejería de Política Territorial indicaron ayer a Efe que el presupuesto había tenido que ser aumentado en un 40%.Sin embargo, Fernando Menéndez, director general de Transportes de la Comunidad, confirmó a este periódico que la modificación del proyecto alterará los costes, pero precisó que una rebaja en las partidas de la cubierta de la estación -diseñada para que los viajeros y visitantes pudieran acceder hasta ella- podría nivelar el presupuesto por debajo de los 2.000 millones, para licitar la adjudicación de la obra antes de que finalice este año.

Grandes almacenes

Menéndez destacó que en el proyecto inicial figuraba un acceso directo desde la autovía M-30 "en curva y con una rampa de un 8% de pendiente", para una media diaria de 2.000 autobuses. A su juicio, el flujo de vehículos atraídos por el nuevo centro comercial, "con unos grandes almacenes similares a los del complejo Azca", garantizaba el colapso del tráfico en el entorno a la estación de autobuses. Menéndez reiteró que el planeamiento urbanístico elaborado por el Ayuntamiento contenía errores de bulto, que han obligado a alterar el proyecto original para permitir el acceso a las dársenas desde la calle de Méndez Álvaro.Por su parte, José Luis Garro, tercer teniente de alcalde madrileño y presidente de la sociedad Estación Sur de Autobuses, culpa al diseño del proyecto del edificio de no responder a las circunstancias de la zona elegida para su ubicación "Nuestros técnicos informaron que el acceso por la fachada que mira a la M-30 podría provocar retenciones en la autovía y además", agrega Garro, "los autobuses deberían descender de un ramal de la M-30 para remontar luego una rampa y girar a la izquierda; era un proyecto incomprensible".

De común acuerdo con la Comunidad, según Garro, se encargó al arquitecto Rafael Torrelo que modificara su proyecto para adaptarlo a la sItuación de la zona, tarea terminada esta misma semana.

La remodelación del área de la estación Sur de autobuses, edificio que ocupa aproximadamente 20.000 metros cuadrados, recoge también un centro comercial (34.500 metros edificados), cinco torres de 14 plantas destinadas a oficinas (65.500 metros) e industrias (51.600 metros cuadrados).

Garro recordó que, aunque el edificio se construye a expensas de la Comunidad, el Ayuntamiento pone el suelo. En una velada advertencia, el edil se mostró de acuerdo con una posible reducción de costes en las partidas de la obra "siempre y cuando no vaya en detrimento del proyecto".