Los autores de una matanza mafiosa en Sicilia son casi todos menores de edad

Los mafiosos que el pasado 27 de noviembre aterrorizaron a la población en la localidad siciliana de Gela, matando en 20 minutos a 10 personas e hiriendo a otras siete, eran casi todos menores de edad. En Calabria, entre tanto, aparecen por vez primera dos mujeres en la cúpula mafiosa. El caso de Gela lo está relatando a la Interpol y a los magistrados sicilianos uno de los 18 jóvenes que la noche de la matanza mafiosa habían desaparecido misteriosamente de la ciudad.El menor, custodiado ahora 24 horas al día por policías con las armas en la mano, era uno de los que la tarde de la tragedia estaba en el bar donde entraron armas en mano los mafiosos que dispararon 100 balas. El joven, que pertenecía, como los muertos, a la familia mafiosa enemiga, se salvó milagrosamente escondiéndose en un rincón del bar desde el que pudo observar todo y reconocer a los asesinos.

Los 18 jóvenes desaparecidos, entre ellos el arrepentido que está cantando, han vuelto a sus casas. Se habían escapado por miedo a caer también ellos, aquella noche, bajo las balas de la familia enemiga. Pero lo que más impresión ha causado en la opinión pública de las confesiones del menor es que en Gela, como en muchos otros lugares dominados por la Mafia, el poder está cayendo en manos de las bandas cuyos miembros son muy jóvenes y que actúan por su cuenta. Estos grupos, para demostrar su potencia, no dudan en matar a sus rivales con una ferocidad aún mayor que la de sus padres.

Y son estas nuevas generaciones las que, por ejemplo, se presentan a los comerciantes pidiéndoles también una tangente o comisión, es decir, un nuevo impuesto mafioso que se suma al que ya están pagando a la Mafia adulta. El joven menor de edad ha contado a los jueces que actualmente la Mafia, en realidad, sólo "lucha por el control de dicho impuesto".

Manifestación de protesta

En Gela, el pasado martes, hubo una imponente manifestación popular contra la Mafia, a la que acudieron miles de personas, que desfilaron en una procesión silenciosa de varios kilómetros.Por su parte, en la Mafia calabresa, llamada la N'drangheta, está apareciendo un fenómeno también nuevo: la presencia de mujeres en la cúpula de la organización. En la redada llevada a cabo por los carabineros el martes pasado en Reggio Calabria aparecen dos mujeres consideradas como las más duras del grupo. Se trata de dos hermanas: Giuseppa y Caterina Condello. La primera, esposa del boss Nino Imerti, apellidado el Enano Feroz, quien desde la clandestinidad lleva desde hace cinco años dirigiendo una batalla sin cuartel a sus rivales; esa lucha ha causado casi 1.000 muertos. La segunda está detenida en su domicilio porque acaba de dar a luz, a pesar de que su marido lleva en la clandestinidad también cuatro años. La gente dice que eso es «un normal milagro de la Mafia".