La Mafia mata a 10 personas e hiere a siete en 20 minutos en un pueblo siciliano

En la pequeña ciudad siciliana de Gela, provincia de Caltanissetta, con 90.000 habitantes, la Mafia asesinó el martes en el periodo de 20 minutos a 10 personas e hirió gravemente a otras siete en cuatro puntos distintos del lugar, creando el pánico entre sus habitantes. Mientras, los carabineros han iniciado una huelga de hambre para exigir mejor sueldo por los riesgos de su trabajo.

El ministro del Interior, Enzo Scotti, napolitano, convocó ayer de forma urgente en dicha ciudad al alto comisario contra la Mafia, Domenico Sica, quien se reunió con todas las fuerzas vi vas de la provincia y de la región. En una declaración, el ministro Scotti dijo, sin pelos en la lengua: "Estamos en guerra". El Estado, añadió, debe usar todos los medios necesarios para defenderse, pero sin olvidar que "una guerra no se vence en un día".Las 10 víctimas de la Mafia en Gela -una ciudad donde 15.000 casas fueron construidas ilegalmente, lo que representa dos de cada tres edificios- eran jóvenes. Ninguna superaba los 35 años y dos de ellas no llegaban a los 19 años.

Al parecer, se ha tratado de un ataque frontal, para adueñarse del poder mafioso de la ciudad, contra el jefe en clandestinidad Giuseppe Madonia. Una guerra que había empezado el 23 de diciembre de 1987, cuando fueron asesinados Orazio Coccomini y Salvatore Lauretta, del clan opuesto a Madonia. La pugna tiene como objetivo adueñarse del control de la construcción de la presa de Suerí Y del tráf-ico de droga.

Cierre de empresas

La situación de la criminalidad organizada, que sólo en la pequeña localidad de Gela ha causado un centenar de muertes en tres años, 383 en Sicilia desde enero, 297 en Campania y 183 en Calabria, según datos oficiales de la Interpol -aunque se piensa que las víctimas son más en realidad- ha recrudecido de forma alarmante en los últimos tiempos, mientras las pocas empresas privadas que actuaban en dichas regiones están cerrando sus puertas para no seguir sufriendo los chantajes de la Mafia. Ésta aumenta cada vez más el precio de sus exigencias para dejar trabajar en su reino, donde hasta el presidente de la República, Francesco Cossiga, ha declarado que el Estado "se siente impotente".Por ello, los magistrados y abogados de toda Italia han proclamado para el 14 de diciembre una huelga nacional pidiendo más medios para trabajar, al tiempo que denuncian las relaciones entre "la política y el poder mafioso".

También el cuerpo de Carabineros, cuyos miembros son los más expuestos en la guerra contra la Mafia y muchos de los cuales acabaron muertos por las balas del crimen organizado, ha entrado desde ayer en huelga de hambre en casi todas las grandes ciudades del país, pidiendo ser equiparado en todo al cuerpo de Policía. Los carabineros denuncian que se ven tan expuestos como los policías y están, en cambio, peor pagados y menos considerados.

Los carabineros han enviado una carta al jefe del Estado y han pedido audiencia al presidente del Gobierno para explicar los motivos de su drástico gesto de protesta.

Mientras tanto, ha sorprendido una sentencia del Tribunal de Apelación de Turin, emitida el martes, cuyos jueces han anulado 26 cadenas perpetuas y han absuelto a muchos de los 350 condenados en el primer proceso del llamado clan mafioso de los cataneses. De los 350 que, tras haber sido juzgados y condenados, habían sido encarcelados, sólo 20 han quedado en prisión. Los demás ya están libres.