Tres 'guerrilleros', juzgados por colocar cuatro bombas en bancos de La Coruña
Ramón Piñeiro, Beiro, Eduardo Abad Lojo y Manuel Quintans López, miembros del Exército Guerrilleiro do Povo Galego Ceibe, fueron juzgados ayer en la Audiencia Nacional acusados de la colocación de cuatro artefactos explosivos en otras tantas entidades bancarias de La Coruña en el otoño de 1988.
Tres de las bombas hicieron explosión y provocaron daños materiales evaluados en unos 25 millones de pesetas.
El fiscal ha solicitado 24 años de cárcel para cada uno de los acusados por un delito continuado de estragos. Piñeiro y Abad están considerados autores materiales de la colocación de las bombas, mientras que Manuel Quintans esta procesado como inductor, ya que fue quien ordenó a los activistas la realización de los atentados.
Los tres acusados se negaron en el juicio a responder a las preguntas de la fiscal por ser representante del Estado español. Sin embargo, a preguntas de la defensa, negaron haber participado en la colocación de los artefactos. Piñeiro denunció haber sido objeto de malos tratos tras su detención, pero la fiscal señaló que el activista había ratificado ante el juez, donde no hubo malos tratos, su primera declaración en la que admitía su participación en los atentados.
