Un comentario de Barkley provoca la ira entre los grupos feministas

Charles Barkley, alero de los Sixers de Filadelfia y uno de los jugadores más conocidos de la NBA, pidió ayer disculpas por un comentario que fue interpretado como una ataque a la dignidad de las mujeres por parte de grupos feministas. Tras una difícil victoria ante los Nets de Nueva Jersey, Barkley declaró: "Éste ha sido el clásico partido que si lo pierdes vuelves a casa y la emprendes a palos con la mujer y los niños".

"¿Habéis visto a mi mujer saltando de alegría al final del partido?. Eso es porque sabía que yo no iba a pegarle", manifestó. Preguntado por un periodista si quería cambiar sus palabras, replicó: "¡Bah! Que se vayan a la mierda esas feministas".

Roberta Hacker, portavoz de la Asociación de Mujeres Maltratadas de Filadelfia, indicó: "Seis millones de mujeres son maltratadas cada año. Eso no es nada divertido".

Roberta Hacker considera que el alero de los Sixers debería ser multado, puesto que tiene una responsbilidad social como figura pública del deporte: "Los malos tratos a los mujeres están asociados muchas veces a una cosa tan simple como la victoria o la derrota de un equipo".