Esperando a Godot

Si la humanidad alguna vez establece contacto con seres de otros mundos, es posible que ocurra a lo largo de la vida de los niños de hoy. Durante los pasados 30 años los intentos para escuchar mensajes de radio de los extraterrestres se han vuelto cada vez más sofisticados. (...)La ausencia de evidencia no implica necesariamente la evidencia de la ausencia. No haber conseguido escuchar ningún mensaje quizás simplemente signifique que los alienígenas menosprecian las ondas radiofónicas. Esto puede indicar que son lo suficientemente compasivos como para no establecer contactos con seres primitivos, como los hombres, debido al daño que pueden ocasionar con tal choque cultural; o a lo mejor es que temen ser hallados. No obstante, si la humanidad continúa buscándolos, podría encontrar alguna pista, incluso, del alienígena más prudente, siempre que utilice una tecnología más avanzada. (...) Un mensaje de tal civilización sería, en cierta forma, un avance del futuro. Pero también una visión fugaz del pasado, ya que un mensaje de cualquier lugar de la galaxia recibido hoy pudo ser enviado hace 60.000 años. (...) Aunque los mensajes los recibamos gracias a la ciencia, no hay ninguna razón para creer que dichos mensajes serán científicos. Imaginemos que son como la tumba de Tutankamón, entendida (...) como la creación de una cultura demasiado distante como para comprenderla realmente (...).

18 de noviembre