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Dos trabajadores fallecen al caer desde una torreta de 30 metros

Juan Antonio Carbajo

Dos trabajadores que se encontraban en lo alto de una torreta de Hidroeléctrica renovando el material fallecieron sobre las 10.30 de ayer al precipitarse al vacío desde una altura de unos treinta metros. La caída se produjo al doblarse la cruceta de la estructura en la que se encontraban los obreros y que pudo ceder durante la maniobra de tensado, según las primeras hipótesis. Antonio Ropero Dávila, de 46 años, y José María García Muñoz, de 30, murieron en el acto.

El guardagujas de la estación de Santa Catalina, ubicada en Entrevías, junto a la carretera de Villaverde a Vallecas, pudo presenciar la escena. Se encontraba en una caseta, elevada sobre las vías y justo enfrente de la torreta de Hidroeléctrica a la que se habían aupado cinco trabajadores.

"Dos de ellos estaban encima de un brazo de la torre que de pronto cedió. Uno cayó directamente al suelo, pero el otro fue rebotando en la estructura de la torreta. Salí corriendo con una sábana porque me temí que ninguno estaría con vida", comentó.

Los trabajadores pertenecen a la empresa Cobra, dedicada a montajes eléctricos y, en esta ocasión, contratada por Hidroeléctrica para sustituir los aislantes de la torre.

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Dos obreros cayeron al vacío al ceder la cruceta de una torre

Viene de la página 1Según diversos testimonios, el accidente sobrevino cuando dos vehículos pesados estaban tensando los cables sostenidos por una de las seis crucetas de la torre. Por causas que se desconocen, el brazo sobre el que se encontraban los dos trabajadores se desprendió de la estructura metálica. Tampoco se pudo precisar cómo se habían colocado los empleados los cinturones de seguridad, que no lograron evitar la caída. "Posiblemente se rompieron o, si estaban en la cruceta, se desprenderían", apuntó un empleado de la empresa.

Otra persona afirmó que no existía comunicación entre los trabajadores encaramados en la torreta y los conductores de los vehículos que tensaban los cables. "Es imposible que les hubieran oído en el caso de que intentaran advertir a los de abajo de alguna anormalidad".

Los compañeros de los trabajadores fallecidos se encontraban a pie de obra, horas después del suceso, muy afectados. Uno de los fallecidos, José María García, Ilevaba un montón de años en la empresa", explica uno de ellos. "Le llamábamos El Manchego". García, que vivía en Daimiel (Ciudad Real), estaba casado y no tenía hijos. Ropero, por su parte, era natural del Valle de la Serena (Badajoz).

El personal de Hidroeléctrica que acudió a la zona del accidente declinó realizar cualquier conjetura sobre el suceso. Unicamente se limitaron a desmentir que pudiera haber sido provocado por una descarga eléctrica. "La línea se encontraba fuera de servicio para pode realizar el trabajo. No había ninguna posibilidad de que se puediera producir una descarga".

Los trabajos consistían en la renovación de los aislantes. "Esta línea es muy antigua y hay que cambiar los aislantes de chocolate [de porcelana de color marrón oscuro] por otros de cristal", explicó un obrero. La torreta es la número 13 de la línea eléctrica Villaverde-Legázpi.

Cortes de luz

Algunos barrios de esta zona de Madrid estuvieron sin luz durante gran parte del día de ayer. El corte del servicio realizado sobre las ocho de la mañana para que se realizaran los trabajos siguió después, ya que la juez de guardia ordenó que no se restableciera el fluido eléctrico.

Miembros del sector de CC OO apuntaron ayer que "desde que las contratas se encargar de realizar los trabajos más especializados ha aumentado la siniestralidad.

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