El Ayuntamiento continúa los derribos de edificios ilegales de la cañada real

Juan José Escribano, propietario de la granja porcina de Vallecas que fue derribada la semana pasada, sufrió un ataque de nervios cuando el pasado jueves operarios municipales procedieron a demoler la casa anexa que estaba construyendo.Escobar dijo que cuando se dirigía hacia su parcela, declarada ilegal por el Ayuntamiento, "entró en la misma una excavadora municipal y comenzó el derribo sin que me advirtieran con la orden correspondiente". Escribano mantiene que cuando le derribaron la granja porcina quedaron sepultados bajo los escombros algunos cerdos, hecho que los responsables municipales niegan, asegurando que los animales fueron trasladados al matadero de la demolición.

Elena Utrilla, concejal de la Junta Municipal de Vallecas Villa, ha declarado que se están acabando de resolver todos los expedientes iniciados contra los vecinos de la cañada real que se encuentran en situación de parecida ilegalidad.

Según esta concejal, el suelo donde se ubican las parcelas es público de la Comunidad de Madrid y calificado como protegido por ser el antiguo camino utilizado por el ganado para atravesar Madrid capital, así como otros pueblos de la comunidad. Hace aproximadamente 11 años, la zona comenzó a ser ocupada por distintas construcciones.