La subida salarial media a lo largo del año ha superado el 8%, según Martinez Noval

El ministro de Trabajo, Luis Martínez Noval, señaló ayer, al hacer un balance de la negociación colectiva en España, que en 1990 se ha producido un incremento medio salarial "ligeramente superior al 8,1%, lo que supondrá una ganancia real media por asalariado (mejora del poder adquisitivo) de alrededor de 1,5 puntos (sin tener en cuenta las cláusulas de revisión), que se convertirán en dos puntos si la inflación de 1990 es del 6,5%".

El ministro, que intervino en las Jornadas de Relaciones Industriales, celebradas en el Instituto Nacional de Industria, dijo que un "mecanismo" para reformar y mejorar la negociación colectiva en España es que las mejoras de productividad se destinen "a la constitución de fondos de pensiones y de inversión o a la reducción de la jornada de trabajo".El titular de Trabajo señaló que para acercar nuestra negociación colectiva a la del resto de los países de la CE hay que "renovar las técnicas de fijación de salarios y establecer formas de participación de los trabajadores en el beneficio de las empresas".

Al hacer su balance sobre la negociación colectiva de 1990, Martínez Noval destacó que el incremento salarial medio ha superado el 8,1 %, y que la jornada laboral se ha reducido en 3,4 horas.

El ministro señaló que los 1,5 millones de asalariados incorporados al mercado de trabajo durante el último trienio "permanecen al margen de la negociación colectiva". De esta manera, en 1990 el índice de cobertura de los convenios, en relación con la población asalariada, volvió a disminuir por cuarto año consecutivo, situándose en el 73%.

Abaratar el despido

Por otro lado, Martínez Noval desmintió que su ministerio quiera liberalizar el despido, "o el abaratamiento del coste del mismo", y que la aceptación del Gobierno para negociar la reforma de las modalidades de contratación no signifique que desaparezca el contrato temporal. Matizó, sin embargo, que antes de ponerse a negociar, el ministerio quiere "tener una idea exacta de las consecuencias que se deriven de una modificación" de la contratación, por lo que han encargado a una comisión que estudie lasposibles consecuencias de esta reforma en un informe que estará terminado a principios del próximo año.En cuanto a la ley de huelga, el ministro puntualizó que no es partidario "de una acción autónoma", por lo que establece como condición imprescindible para la elaboración de una ley de huelga la existencia de un "consenso previo" por parte de empleadores y trabajadores, "porque lo que importa es la eficacia social", señaló.

La semana que viene se reabrirán las mesas de negociación entre el Gobierno y los sindicatos que quedaron interrumpidas antes del verano. La primera de ellas tratará de la creación del Consejo Económico y Social que, según Martínez Noval, será un órgano consultivo, por lo que no estará presente en el mismo el Gobierno, sino los empresarios, los trabajadores y los representantes de diversos intereses sociales. El ministro tratará este tema por separado con cada uno de los sindicatos mayoritarios (UGT y CC OO), a propuesta de ellos, y también lo hará con la patronal CEOE. El ministro señaló que espera que en las tres mesas que habrá "se produzcan avances importantes para elaborar un anteproyecto de ley", afirmó.