PNV se consolida como ganador El PP experimenta un gran avance y el PSOE desciende ligeramente

Uno de cada cuatro electores de Euskadi -26%- votará al Partido Nacionalista Vasco en los comicios del próximo día 28, según un sondeo de Demoscopia. El partido liderado por el lehendakari José Antonio Ardanza -apoyado por un tercio de los consultados como jefe del Ejecutivo autónomo- sube en el favor de los ciudadanos a expensas, sobre todo, de Eusko Alkartasuna. Los socialistas acapararían el 20%de los votos, como segunda fuerza, y el PP triplicaría sus escaños. El País Vasco afronta sus elecciones en un ambiente político más optimista que en 1986, con el deseo del 19% de los preguntados de que, si hay Gobierno de coalición, éste sea nacionalista.

El Parlamento que surja de los comicios autonómicos vascos, que se celebrarán dentro de tres semanas, el 28 de este mes, mantendrá básicamente la correlación de fuerzas que existe ahora según un sondeo de Demoscopia para EL PAÍS. La configuración procede de las últimas elecciones autonómicas de 1986, aunque, según los resultados de la consulta, se producirán cambios significativos en algunos de los partidos menores, tanto de carácter nacionalista -Eusko Alkartasuna (EA)- como de ámbito estatal -(Centro Democrático y Social (CDS) y Partido Popular (PP)El Partido Nacionalista Vasco (PNV) va en cabeza en el favor de los votantes, seguido del Partido Socialista de Euskadi (PSE-PSOE) y Herri Batasuna (HB). Se registra, según el parecer de los consultados, un descenso en el número de votos conseguido por EA y una pérdida de toda representación del CDS. El Partido Popular registra un ascenso significativo.El PNV, con un ligero incremento de su apoyo electoral, continúa a la cabeza de las fuerzas políticas con el 26% del voto (uno de cada cuatro votos válidos). Incrementa su apoyo en las tres circunscripciones vascas. Esta subida se produce especialmente a expensas del antiguo voto de EA, que desciende en las tres provincias en una proporción aproximada del 25% respecto a las elecciones autonómicas de 1986. EA bajaría proporcionalmente mucho más en Alava (35%) y en Vizcaya (32%) que en Guipúzcoa (17%). El PNV obtendría así, según los consuiltados, entre 19 y 21 escaños frente a los 17 .1 que tenía hasta ahora.Descenso del PSEEn segundo lugar saldría el PSE-PSOE, con cerca del 20% de los votos, algunos puntos por debajo de 1986. El descenso se registraría en Vizcaya y Guipúzcoa, que no en Álava, donde mejoraría posiciones ligeramente. El PSOE puede perder un escaño de los 19 que tenía hasta ahora.HB continuaría como tercera fuerza política de Euskadi, con un mantenimiento básico del voto que tenía hasta ahora (en torno al 18% y con tres escaños) Lo mismo ocurriría a EE, con algo más del 10% del voto y nueve escaños, que esta vez, sin embargo, podrían bajar hasta siete.

En el centro-derecha nacional se produciría un cambio significativo con el ascenso del PP en prácticamente un 100% del voto anterior (8%) y, sobre todo, en escaños (seis o siete frente a los dos que ahora tiene). Por el contrario, el CDS perdería íntegramente la representación de dos escaños que desde 1986 tenía en el Parlamento vasco.

Otras fuerzas políticas, como Izquierda Unida (IU), Unidad Alavesa o Democracia Socialista no obtendrían el apoyo suficiente de los electores para conseguir entrar en el Parlamento de Vitoria.

Un 65% de los ciudadanos censados en Euskadi participarán en las elecciones vascas, lo que supone dos puntos menos sobre el porcentaje de electores que acudieron a las urnas en los comicios generales de 1989 (67%) y cuatro puntos inferior al índice de participación en las elecciones autonómicas de 1986 (71%).

La estimación de voto se hace a la vista de las manifestaciones de opinión de los consultados en sentido estricto antes de las distintas elecciones y su comparación con las estadísticas de participación efectiva en las mismas (en este caso, el porcentaje que manifiesta que piensa ir a votar con seguridad es del 58%, mientras que antes de las autonómicas de 1986 era de un 74% y antes de las generales de 1989, un 62% de los ciudadanos censados pensaban votar).

Por otra parte, los niveles de participación en las tres provincias vascas suelen ser muy parecidos, a veces un poco más alta en la circunscripción de Guipúzcoa.