La ONU estudia nuevas represalias contra Irak
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) estudia nuevas medidas de fuerza contra Irak tras su condena unánime de las incursiones de tropas iraquíes en las embajadas de Francia, Canadá, Túnez y Holanda en Kuwait y la detención de varios diplomáticos. El representante canadiense calificó esas acciones de "inaceptables" y exigió la libertad inmediata de los funcionarios detenidos". Mañana se abre en Nueva York la Asamblea General de la ONU.
El Consejo de Seguridad reafirmó ayer las resoluciones condenatorias y de bloqueo a Irak contenidas en las resoluciones 660 661, 662, 664, 665 y 666 y calificó las acciones de las tropas iraquíes que invadieron cuatro embajadas en Kuwait el pasado fin de semanas como "una violación a los acuerdos de la Convención de Viena de 1961 y 1963".[Por su parte, un portavoz del ministerio iraquí de Asuntos Exteriores calificó de "viciada" la nueva condena de la ONU por "obedecer a una presión de EE UU y sus aliados dentro de la campaña emprendida contra Irak", informa Reuter.]
La reunión del consejo se produjo pocas horas después de que Irak rechazara la resolución de las Naciones Unidas autorizando el envío de alimentos y medicinas para los extranjeros atrapados en Kuwait e Irak. Bagdad consideró esa medida "injusta" y también se negó a recibir al enviado especial de la ONU para supervisar el reparto de esa ayuda humanitaria.
En una reunión de urgencia celebrada la madrugada del pasado domingo, el Consejo de Seguridad, basándose en el capítulo 7º de la Carta de las Naciones Unidas, exigió al Gobierno de Bagdad "la libertad inmediata de los diplomáticos detenidos en Kuwait". También solicitó de una forma unánime "la libertad de todos los extranjeros que se hallan en Irak y Kuwait" y el "completo cumplimiento de las resoluciones 660, 662 y 664, que afectan a las regulaciones adoptadas en la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas y legislación internacional".
Los miembros del consejo reclamaron asimismo "la protección inmediata de los diplomáticos que se encuentran en esos dos países y la inviolabilidad de las embajadas y oficinas consulares". El consejo acordó además iniciar "una serie de consultas encaminadas a tomar medidas más concretas lo antes posible para dar respuesta a las continuas violaciones de Irak al capítulo 7, a las resoluciones adoptadas por el Consejo y a las normas de derecho internacional". El consejo consideró que la decisión de Irak de cerrar las misiones diplomáticas en Kawait y no respetar la inmunidad de las personas que se encontraban encerradas en esas oficinas "contradice las decisiones del Consejo de Seguridad y las convenciones internacionales".
Los miembros de este organismo explicaron que se hallaban profundamente preocupados por la falta de cumplimiento por parte de Bagdad de las medidas adoptadas por la ONU al cometer actos de fuerza contra las embajadas extranjeras en Kuwait". El consejo calificó de "ultraje" el comportamiento de Irak y sus recientes violaciones, y recordó a Bagdad su "completa responsabilidad" por cualquier uso de la violencia contra los extranjeros o contra cualquier diplomático o cualquier funcionario adscrito a una misión consular en Kiiwait".Asamblea General
Mañana se reúne en Nueva York la Asamblea General de la ONU. La 45ª sesión anual del organismo no estará marcada, como se esperaba hace unos pocos meses, por el fin de la guerra fría y la caída del comunismo. La crisis del golfo Pérsico se convertirá en el centro de esta convocatoria, que se verá magnificada por la presencia en la sede de la ONU de los más de 50 jefes de Gobierno que tienen previsto participar en una cumbre de dos días que analizará los problemas de los niños del mundo.La Asamblea General contará este año con la participación del presidente norteamericano, George Bush; la primera ministra británica, Margaret Thatcher; el presidente egipcio, Hosni Mubarak; el rey Hussein de Jordania, y el presidente alemán occidental, Richard von Weizsácker.
No está previsto que el presidente soviético, Mijaíl Gorbachov, se desplace a Nueva York como hizo en 1988 para dirigirse a la Asamblea General.
Muchos de los asistentes a este encuentro, que promete ser histórico, participarán en la reunión ministerial que ha previsto la Conferencia de Seguridad y Cooperación en Europa (CSCE), prevista para los días 1 y 2 de octubre.
