Delors critica a los países que quieren retrasar la unión monetaria

El presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors, aprovechó ayer su intervención en Estrasburgo ante el pleno del Parlamento Europeo para hablar de la crisis del Golfo y para denunciar públicamente la actitud de aquellos países que quieren frenar el proceso de unión económica y monetaria (UEM) y la construcción europea.

Las críticas van dirigidas especialmente a España y al ministro Carlos Solchaga, autor de una propuesta que representaría aplazar hasta el próximo siglo la puesta en vigor de medidas para poner en marcha una moneda única. "Algunos quieren tanto la integración que hacen como aquellos amigos que abrazan tan fuerte que acaban ahogando", manifestó Delors. "Quieren una integración tan perfecta que no podría existir", añadió. Las veladas alusiones del presidente de la CE se dirigen también contra la RFA, cuyas autoridades han pasado a sostener que las divergencias en las economías provocadas por la crisis del petróleo aconsejan frenar el ritmo hacia la unión monetaria.Pero la irritación de Delors se centra sobre todo en el ministro español de Economía, Carlos Solchaga, autor de la propuesta formal de rechazo del actual modelo de unión monetaria elaborado por la Comisión Europea. "Espero que el Consejo Europeo de la CE, que se celebrará los próximos 27 y 28 de octubre en Roma, pondrá las cosas en su sitio", afirmó Delors ante los eurodiputados. Esta cumbre extraordinaria de los jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad se celebrará con anterioridad al nuevo consejo especial de ministros de Finanzas convocado para intentar un acuerdo sobre la unión monetaria que permita encarar con cierta confianza la conferencia intergubernamental para la reforma de los tratados a partir del próximo 13 de diciembre.

La alusión de Delors a Solchaga se hizo más concreta cuando habló de los ministros que "se preocupan de dar todo tipo de detalles a la prensa", en referencia a que el ministro difundió por escrito a los periodistas los puntos de su intervención en la reunión de ministros de Finanzas celebrada el sábado en Roma.