Sin novedad en el frente
El antihéroe de Remarque perdió la vida minutos antes del fin de la primera gran guerra. Para él, el parte militar del día: "Sin novedad en el frente", no tenía ya ningún sentido. Para algunos inversores, el parte bursátil de ayer, que debería seguir cuajado de expresiones como atonía, negocio mínimo, indecisión, goteo a la baja y suaves oscilaciones en los cambios tampoco tiene ningún sentido. Sus valores continúan perdiendo en una estrecha ratonera en la que de vez en cuando se produce alguna baja significativa.Ayer, por poner un ejemplo, Citroen perdió un 20% en su cambio y hubo de acudir a un segundo corro ante la caída superior al 10% sufrida en el primero. Fue la baja de un día caracterizado por la ausencia de estímulos y de noticias procedentes del frente con mayúsculas.
El dinero del exterior busca discretamente la salida de emergencia e incluso la renta fija ha perdido atractivo a los ojos foráneos. En este sentido, no faltan en el mercado quienes consideran inevitable una subida en los tipos de interés. Las ventas han enjugado con creces el repunte de la primera sesión de la semana y sólo Telefónica, con un millón de títulos intercambiados, recuerda el más reciente pasado. Ayer, sólo el grupo de comunicaciones se salvó de las bajas, incrementadas en la sesión vespertina.
