Los responsables de los

aeropuertos italianos han prohibido que los empleados lleven televisiones portátiles o aparatos de radio para ver o escuchar las transmisiones de los partidos del Mundial. La medida ha sido tomada "por cuestiones de seguridad". Los empleados sólo pueden ver los partidos en las zonas de reposo, y sólo cuando han terminado sus turnos de trabajo. Los pilotos tienen la posibilidad de saber cómo van los partidos poniéndose en contacto con la torre de control, donde los controladores les facilitan las informaciones futbolísticas con la misma eficacia con la que dirigen su vuelo.