Los "hooligans' quieren entradas a toda costa

Medio mundo está hablando de la posibilidad de enfrentamientos en Turín entre seguí dores alemanes, ingleses y del Juventus. En el parque Ruffini, donde han sido ubicados los británicos, el tema de conversación es muy diferente. "No hay entradas", dice un joven mientras monta su tienda de campaña, "y, si no las sacan de algún sitio, habrá problemas". La policía vigila de cerca a los ingleses, que viajan acompañados por el estigma de la violencia. Algunos seguidores llevaban 10 horas esperando en la cola para comprar una entrada. La cola, de cinco filas y fórmada por unas 500 personas apelotonadas de pie y rodeadas de dos hileras de policías, comenzaba a moverse con nerviosismo. Los responsables de la federación estaban nerviosos. De pronto, un coche de la organización llegó a todo. velocidad mientras un azafato sacaba la mano por la ventanilla haciendo el signo de la victoria. Tenía 1.000 entradas. La noticia fue facilitada a los hinchas a través de un altavoz. Un alarido de alegría, especialmente al oír que sólo tenían que pagar 33 libras, surgi

Hasta el cierre de esta edición, el único incidente que se había registrado se produjo en la plaza de San Carlo, en el centro de Turín, en la noche de¡ lunes, cuando un hincha inglés fue conminado a apagar su cigarrillo por un grupo de italianos. No lo hizo y eso le costó una herida leve de arma blanca. Deberá permanecer 10 días en el hospital antes de volver a su país.

Mientras tanto, el ministro de Deportes británico, Colin Moynlham, muy criticado en su país por sus grandes elogios a la policía, se presentó ayer por sorpresa en Turín. "Las medidas que se han tomado en Italia son correctas", dijo, "y deberán adoptarse a partir de ahora en situaciones parecidas", Moynlham añadió que estaba preparando un inforrae para la primera ministra, Margaret Thatcher, del que dependerá el retorno o no de los clubes ingleses a las competiciones europeas. No quiso desvelar su contenido -"es top-secret", dijo-, pero especificó que se sentía muy optimista , lo que se inter preta como que el Gobierno británico, por primera vez, está dispuesto a asumir el retorno a las Copas de Europa. "En Italia no se han producido los incidentes de la Eurocopa de 1988", afirmó.

Prisión en Palma

Por otra parte, el magistrado del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma de Mallorca dispuso el ingreso en prisión por un período de 72 horas de los seis aficionados británicos detenidos el pasado lunes en Magaluf, informa Andreu Manresa.