Telefonica negocia con el Gobierno la revisión anual de las tarifas un punto por debajo del IPC
JOSÉ ANTONIO NAVAS Telefónica de España ha presentado al Gobierno su plan estratégico para el periodo comprendido entre 1990 y 1994, con el que la compañía se compromete a romper el círculo vicioso que ha caracterizado la evolución histórica de Telefónica, en virtud de cual la mejora del servicio ha sido siempre incompatible con el saneamiento interno de la empresa. Telefónica considera que su reto consiste ahora en no renunciar a ninguno de estos dos grandes objetivos, para lo cual fundamenta todo su plan en la adopción de un marco estable que garantice unas tarifas mínimas de un punto por debajo del IPC real de cada año anterior.
Las negociaciones entre Telefónica y el Ministerio de Economía se iniciaron hace ya casi un año, pero ha sido ahora cuando el consejo de administración de la compañía ha conocido el plan estratégico que contempla de manera oficial la disposición del marco tarifario estable. El denominado Price Cup Regulation funciona ya en distintos países desarrollados, entre los que se incluye el Reino Unido, así como también en EE UU para el servicio de larga distancia. En todos los casos, el IPC es el elemento de referencia para la actualización de las tarifas telefónicas.El nuevo cuadro de precios del teléfono representa en España un compromiso anunciado ya por el Gobierno en la orden ministerial que aprobó la subida de las tarifas telefónicas para 1990. Con esta perspectiva, la compañía que preside Cándido Velázquez ha desarrollado su plan estratégico con unas inversiones en los próximos cinco años de unos 3,6 billones de pesetas. La inversión se traducirá en la instalación de cuatro millones de líneas de abonado en estos cinco años, de tal forma que la red telefónica alcanzará en 1994 la cifra de 17 millones de líneas, frente a los 12,8 millones que conforman el parque actual. La lista de espera que el año pasado se cerró con 503.000 líneas con un plazo medio de instalación de siete meses pasará en 1994 a 140.000 líneas con un período medio de espera por parte del usuario de un mes y medio. El número de líneas por cada 100 habitantes pasará de 31 a 44 en este período, mientras que la cifra de líneas vacantes -que se ha ido agotando como consecuencia del crecimiento de demanda- subirá del 9 al 11 %.
Desde el punto de vista de la calidad del servicio, el objetivo de Telefónica consiste en reducir significativamente el nivel de llamadas fallidas. Según el plan es tratégico, este porcentaje pasará en las llamadas urbanas del 2,3% 90 actual al 1% en 1994; en las inte rurbanas, caerá del 7% al 4% y en las internacionales lo hará desde el 9% al 5%.
La garantía de este proceso de adaptación del servicio público se fundamenta en la adecuación de la estructura financiera de Telefónica, que constituye un elemento indispensable de todo el plan estratégico. El plan financiero de Telefónica se asienta en dos parámetros básicos, que son el incremento de la autofinanciación y la reducción del endeudamiento. Según los datos manejados por Telefónica, la tasa de autofinanciación, que este año será del 50%, aumentará en 1994 hasta el 102,2%. Al mismo tiempo, la tasa de endeudamiento alcanzará su techo en 1993 al situarse en el 55,9%. En otras palabras, el punto de inflexión en la tendencia creciente de la deuda está situado en 1994, con una tasa del 55%.
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