URSS y Rumania, sin Hagi, a saldar sus cuentas pendientes

Rumania, el equipo que ahora puede jugar con una sonrisa en los labios, según las declaraciones de su entrenador, Erich Jenei, pagará una deuda con el pasado. La frase de Jenei se refiere a los nuevos tiempos que corren en su país y en su cuadro desde la revolución que acabó con la tiranía de Ceausescu. Pero Ceausescu vivía el día que Rumania se clasificó para la Copa del Mundo en un duro partido frente a Dina marca. Precisamente, el prisionero de oro de los Ceausescu, el ahora madridista Hagi, fue ex pulsado de la cancha aquella tarde. Hagi, uno de los astros más esperados del Mundial, no podrá jugar hoy en Bari (TVE-2, 17.00 horas), ante la Unión Soviética.Altos vuelos

La ausencia de Hagi, por sanción, no resta atractivos a este partido. Los dos equipos son magníficos y deben demostrarlo en un encuentro de altos vuelos. La presencia de Maradona en este grupo obliga a rumanos y soviéticos a sacar un buen resultado antes del enfrentamiento con Argentina. Para la URSS este Mundial se presenta como una oportunidad para acabar con su viejo mito de escuadra magnífica, pero inconsistente. Los rumanos, nutridos casi exclusivamente con jugadores del Dinamo y el Steaua, poseen una calidad que les puede hacer temibles.

La ausencia de Mijailichenko, una de las perlas soviéticas, desbarata un tanto la fortaleza del conjunto que dirige Valery Lobanovski. Mijailichenko acabó la Eurocopa de la RFA 88 con un enorme prestigio, pero su último año ha estado sembrado de lesiones, la última hace apenas un mes en un encuentro con Israel. A su baja hay que añadir la penosa experiencia de Zavarov y Belanov en el fútbol occidental. Zavarov se acaba de despedir del Juventus y Belanov no ha superado el síndrome consumista que suele producir el Oeste entre los soviéticos. En dos ocasiones ha sido detenido por la policía alemana como presunto autor de robos en grandes almacenes.

Estas dificultades no derrumban al equipo de Lobanovski, que dejará el cargo al final del campeonato después de varios y, también, de un par de infartos de miocardio. La URSS dispone de una defensa veterana y técnica y de unos centrocampistas con un gran manejo del balón y excelentes chutadores. Entre todos destaca Dobrowolski.

Rumania es un equipo sólido en la defensa y con buenos peloteros en el centro del campo y la delantera, aunque falte Hagi . Mateut y Sabau se han instalado como futurÍ bles estrellas y de Dumitrescu hay que recordar que arruinó la carrera de Schuster como libero en el último torneo Teresa Herrera, de La Coruña. Las miradas se dirigirán también al nuevo descubrimiento rumano, Radociu, un delantero casi anónimo para los occidentales, pero perseguido por las secretarías técnicas de los mejores clubes europeos.