Los madrileños deben al municipio 30.000 millones, de los que 12.000 se dan por perdidos
Los madrileños deben al Ayuntamiento, en vía ejecutiva, unos 30.000 millones de pesetas, de los que 12.000 millones corresponden a contribuyentes que en los seis últimos años no han podido ser localizados por haber cambiado de domicilio o por ser erróneos sus datos. Luis María Huete, segundo teniente de alcalde , reconoció ayer esta situación y anunció un refuerzo temporal de losservicios de notificación para determinar si de ese marasmo administrativo es posible cobrar todavía una parte de los recibos pendientes . El resto sería declarado fallido y eliminado de los listados municipales .
La sustitución de las 18 oficinas de recaudación en 1987 por la Empresa de Recaudación Ejecutiva (ERESA) obligó a realizar un importante proceso de depuración de los expedientes pendientes de cobro. Miles de ellos fueron anulados por no estar bien tramitados, encontrarse incompletos o haber prescrito.Sin embargo, quedaron otros muchos que, junto a los de estos últimos años, alcanzan una deuda total de 12.000 millones de pesetas. Hasta ahora, este dinero no era incluido en los presupuestos, ya que los socialistas se basaban en lo realmente cobrado el año anterior para determinar los previsibles ingresos del siguiente ejercicio.
"Calculábamos la cantidad que podíamos cobrar en función de las series históricas de los ejercicios anteriores. En todas las empresas hay un cupo de Impagados y no era lógico incluir a éstos en los ingresos sabiendo que no íbamos a poder cobrarlos", manifestó ayer el concejal socialista Alfredo Tejero, ex responsable de Hacienda.
"Eso está prohibido", añadió el segundo teniente de alcalde, el popular Luis María Huete. "Aunque el estudio de los ingresos de los últimos años indique que en un determinado impuesto sólo se paga el 85%, en el presupuesto no puedo quitar del capítulo de ingresos el 15%, restante y gestionarlo mediante una contabilidad auxiliar. Por ello, este año hemos incluido entre los ingresos presupuestados no sólo la cantidad total que en teoría deberíamos recibir, sino también el de los recibos pendientes", añadió.
Huete reconoce que estos hipotéticos ingresos municipales se verán reducidos a medida que se compruebe que muchos de los recibos pendientes son imposibles de cobrar. "Desde 1987 hasta que se produjo la moción de censura, el equipo socialista no declaró fallido ningún expediente. Esta declaración es necesaria para su eliminación de la matrícula del listado municipal", indicó Huete.
Sin embargo, los múltiples pasos que han de seguirse dificultan la depuración de los listados. En la actualidad, ERESA ha pedido al Ayuntamiento que considere fallidos 11.281 expedientes, por un importe de 81 millones de pesetas, por tener sus datos defectuosos. Por este mismo motivo, ERESA tiene pendientes de remitir otros 2.997 recibos, por un total de 56 millones, y otros 1.883 con un importe de 70 millones, por insolvencia total o parcial de los deudores o por desconocimiento de su paradero.
Maquinaria burocrática
Estas cifras de fallidos son muy bajas a la vista de los 12.000 millones que se calcula suman los recibos impagados, a los que este año se añadirán otros debido a la la burocrácia. "Es cierto que existen defectos de matrículas que hay que depurar, y es muy complejo el procedimiento que se sigue hasta declarar un fallido. Pero vamos a reforzar el servicio para determinar si los contribuyentes que tienen una deuda antigua se encuentran en algun supuesto que motive su baja", dijo Huete.
