Los sindicatos aceptan negociar la regulación de la huelga, y el Gobierno, los fondos de inversión

El Gobierno aceptó ayer la propuesta sindical de incluir en la segunda fase de concertación social una mesa en la que se negociarán los fondos de inversión para controlar los beneficios empresariales. A su vez, UGT y CC 00 admitieron discutir la autorregulación de la huelga y de los servicios esenciales para los conflictos colectivos. Esos compromisos se alcanzaron en el curso de una larga y difícil reunión, celebrada por los ministros de Economía y de Trabajo con los principales dirigentes de las dos centrales mayoritarias, en la que se encontraron importantes discrepancias.

Consecuencia de esas diferencias es que se aplaza la revisión de las modalidades de contratación porque los sindicatos no están dispuestos a que se aborden en una negociación tripartita con CEOE, tal como propone ahora el Gobierno.El único compromiso claro alcanzado ayer por los titulares de Economía y Trabajo, Carlos Solchaga y Luis Martínez Noval, con los secretarios generales de UGT y CC 00, Nicolás Redondo y Antonio Gutiérrez, es abrir con carácter inmediato, incluso esta misma semana, seis mesas de negociación en las que el Gobierno y los sindicatos van a discutir medidas de reparto del empleo -Incluye la revisión de la jornada laboral, la jubilación y las hora extraordinarias-; ayudas al sistema de sanidad pública; la vivienda social; la reforma fiscal; la ley de salud laboral y temas medioambientales. Dos de esas mesas serán coordinadas desde los Ministerios de Sanidad y Obras Públicas y el Gobierno se reserva la posibilidad de establecer otros debates similares con CEOE.

El resto del temario que el Ejecutivo y los sindicatos se proponen debatir ofrece enormes dificultades y las dos partes precisaron ayer una reunión de algo más de cinco horas y media para establecer el orden de prioridades, el método de negociación y si se tratan en temas tFipartiats o bipartitas. De momento, ambas partes coincidían en tratar de forma tripartita la formación profesional en la empresa. Sin embargo, CEOE anunció ayer que no acudiría hoy a la reunión con vocada por Trabajo con la patronal y las centrales para debatir el plan de formación e inserción profesional (FIP), por considerar que no forma parte de la concertación a la que CEOE no se considera oficialmente llamada. A última hora de ayer, sin embargo, la CEOE fue convocada para la primera reunión de la segunda fase de concertación, que se celebrará el día 12.

Solucionar problemas

Ante las discrepancias detecta das en relación a los restantes asuntos, el Ejecutivo, UGT y CC 00 han optado por formar unos grupos de trabajo que, sin concretar fechas, solventen los problemas antes de formaliza mesas negociadoras. De esa forma se va a abordar la participación sindical en las empre sas; los conflictos colectivos servicios esenciales y todo lo referente a la autorregulación de la huelga; los fondos de inversión para controlar los beneficios empresariales que serán objeto de un grupo de estudio que analice las experiencias en distintos países europeos; y la ampliación de la cobertura del desempleo.

Sobre los fondos de inversión, Carlos Solchaga no aclaró si la intención del Gobierno es ponerlos en marcha por ley o mediante negociación entre patronal y sindicatos, aunque sí afirmó que "es dificil hacer una ley si no existe un acuerdo previo entre los interlocutores sociales", extremo que fue criticado por Antonio Gutiérrez y Nicolás Redondo, quienes creen que el consenso con CEOE en este tema es imposible.

La revisión de las modalidades de contratación en la mesa de empleo, donde también se va a incluir el decreto de incentivos a los contratos fijos que el Gobierno tiene preparado hace meses, va a ser tratado asimismo previamente por una comisión de expertos. Las centrales han tenido que ceder, pese a ,que para ellas era una mesa urgente y prioritaria, porque el Gobierno propone ahora que sea objeto de un debate tripartito con la participación de CEOE. Carlos Solchaga asegura que el Ejecutivo no descarta que la negociación de la política de empleo sea bilateral, pero seguirá insistiendo en que es preferible no iniciar dos debates paralelos, uno con los sindicatos y otro con los empresarios.

Otro criterio impuesto por el Gobierno es institucionalizar cuanto antes el Consejo Económico y Social (CES),porque entiende que ése es el marco apropiado para debatir el impacto que tendrá en la economía la entrada en vigor del mercado único en 1993. Solchaga anunció a los sindicatos y a la Prensa que allí es donde el Ejecutivo presentará una negociación sobre política de rentas.

Nicolás Redondo subrayó que la reunión fue más controvertida de lo previsto, ya que el Gobierno pretendía que "algunos puntos de la PSP se incluyeran en un supuesto pacto de competitividad".