Glenn Miller en francés

La esperada actuación de la orquesta de Glenn Miller fue sustituida a última hora por la orquesta francesa de René Coll que, a pesar de ser menos legendaria, dió juego a los ansiosos del baile quienes también pudieron disfrutar gratuítamente del sonido de la Orquesta Alcatraz. Familias del barrio de Salamanca, turistas, jóvenes e incondicionales de las verbenas acudieron a este doble concierto.La orquesta Alcatraz, compuesta por 12 músicos, comenzó su actuación cuando aún no había anochecido, a las 21.25 horas, 25 minutos después de lo anunciado. Los asistentes se sentaron en los bancos de cemento o en algunas sillas colocadas para la ocasión. Los más jóvenes se instalaron en la zona verde de la plaza, que se fue llenando poco a poco. No faltaron litronas, bocadillos, porros y patatas fritas en este concierto popular.

Se pudo escuchar desde un chotis salsero a una versión del Lel it be de los Beatles, que más de una pareja siguió con auténtica pasión. Pero el ritmo de un pasodoble fue el más seguido. Hasta los más tímidos bailaron al popular compás, algunos con patines incluidos.

La luz del primer escenario falló por unos segundos a las 22.30 horas, pero nadie se inmutó.

La orquesta francesa René Coll, con 10 músicos, cuatro cantantes y dos bailarines, empezó su actuación a las 23.15 horas, diciendo: "No sabemos nada de lo que se toca en España, pero vamos a tocar lo que se escucha a 2.000 kilómetros, en París. Esperamos que les guste y se diviertan". Y aunque gustó, más de uno se fue protestando: "Esto no es una verbena madrileña".