Madani, el mesías de Argel

Una oleada de integrismo islámico se abate sobre Argelia, cuando apenas se cumple medio año de la legalización de los partidos. En nombre del Corán se intimida a las feministas, se lucha contra la droga, la corrupción y la prostitución. Es una nueva guerra santa que nadie sabe cómo controlar. Uno de los responsables de esta oleada de integrismo islámico es Abbassi el Madani, presidente del Frente Islámico de Salvación.

Todos los partidos políticos, incluido el propio Frente de Liberación Nacional (FLN, en el poder), están atemorizados por la influencia de Madani. Visto de cerca, tiene un aspecto inofensivo, pero sus palabras le delatan y ponen al descubierto ese singular mesianismo que se erige en las puertas de Europa y en el epicentro del Magreb. Madani vive en una casa sencilla en uno de los arrabales de Argel, permanentemente custodiado por un grupo de colabora dores. Tiene 59 años, trabaja como profesor de Ciencias de la Educación en la Universidad de Argel y es padre de cinco hijos. Se ha dejado caer en el fondo de un sillón mientras poco a poco ha ido desgranando un largo discurso en francés, árabe e inglés. Sólo lo ha interrumpido para rezar junto con sus colaboradores la última plegarla del día. Luego ha regresado a su sillón, a su largo discurso etéreo y divagante.

Madani se siente controlado por la oposición y la opinión pública. Sobre todo desde el pasado 20 de abril, como consecuencia de la marcha integrista que reunió en la ciudad a más de 80.000 personas. Fue una prueba de fuerza que ningún partido democrático le perdona. En determinados medios políticos se empieza a asegurar que la legalización del FIS puede acarrear graves consecuencias políticas. Por este motivo, el discurso de hoy del presidente del FIS es moderado y conciliador. "El FIS no es un frente de minorías o élites. Es un frente unitario para todas las clases del país. Su objetivo principal es responder a sus necesidades y solventar la crisis económica, social y cultural. Para ello hemos decidido impulsar una solución islámica".

Pregunta. ¿Qué método piensan utilizar para imponer la solución islámica en Argelia?

Respuesta. Jamás utilizaremos la fuerza para imponer la solución islámica. Si el pueblo argelino no acepta la propuesta del FIS, en las próximas elecciones generales, ésta no se llevará a cabo. Es imposible alimentar a alguien por la fuerza u obligarle a entrar en el paraíso.

P. Si ganan las elecciones, ¿piensan respetar la existencia de los partidos democráticos?

R. Sí. Aceptaremos a todas las fuerzas políticas. No queremos quedar aislados. Somos conscientes de que si nuestro poder tiene un inicio tendrá también un final. La nación tiene necesidad de todos los jóvenes.

P. ¿Y si pierden?

R. Las elecciones no son más que un medio. Y no es el único medio. El periodo de un Gobierno no puede condicionar la vida de un partido.

P. Se acusa al FIS de utilizar los púlpitos de las mezquitas de Argel para hacer política.

R. Las mezquitas están hechas para esto. De la misma manera que se fabrican las tazas para tomar el café. No sería lógico hacerlo con un zapato.

P. Uno de los aspectos más oscuros del FIS es su financiación.

R. El FIS ha decidido rechazar la ayuda que el Gobierno ha otorgado a los partidos políticos. Los partidos que acepten este dinero estarán limitados por el sistema. Y si no aceptamos el dinero del Gobierno, tampoco aceptaremos el de otros países.

La financiación del FIS

P. Se dice que el FIS se financia principalmente con las aportaciones de los pequeños comerciantes de las grandes ciudades.R. El comercio no es robo. Los comerciantes, incluso los pobres y los trabajadores, pueden participar con su ayuda. Si un niño que viene a la sede del FIS y nos da un dinar, se lo aceptaré.

P. Determinados partidos políticos acusan al FlS de promover una red en el exterior, básicamente en Francia. Se asegura que existen núcleos integristas promovidos por el FIS en Lyón, Marsella o París.

R. Somos un partido legal. Hasta ahora no hemos formado ninguna célula o núcleo ya que carecemos de permiso. Tenemos pensado crear unas plataformas entre los emigrantes de Europa, pero aún no lo hemos hecho.

P. En el seno del FIS hay importantes tensiones. Básicamente entre usted y Ali Belhadj. Se le atribuye a este último la dirección del ala radical del partido y la decisión de convocar la marcha del 20 de abril mientras usted estaba en el extranjero.

R. No es cierto. Todos tenemos nuestra opinión, pero nuestras diferencias no afectan a la unidad del partido.