No apto para afónicos
Un vasco ganó el concurso de gritos de Colmenar de Oreja, en el que participó una treintena de personas
Andrés Lizarraga, un soltero de 24 años natural de Astigarraga (San Sebastián), fue el ganador del I Concurso Nacional de Gritos de Colmenar de Oreja. Subió al escenario y pegó un grito de guerra árabe, original, intenso y duradero, que fue adornado al final con un cambio de tono. Otras 28 personas provenientes de toda España optaron al premio en la noche del sábado, dentro de un singular concurso que se ha incluido en la programación festiva de este pueblo madrileño.
Poco antes de las dos de la madrugada del domingo, los tres presentadores del concurso anunciaban al numeroso público concentrado en la Plaza Mayor de Colmenar de Oreja el comienzo de la prueba.Unas horas antes, 33 participantes de toda España se habían inscrito para forzar sus gargantas. Eran mujeres", hombres, niños y niñas, procedentes de Valladolid, Zaragoza, San Sebastián, Toledo, Sevilla y de pueblos y barrios de Madrid. Sus edades estaban comprendidas entre los 12 y los 61 años.
En total se oyeron 29 gargantas (hubo algunos abandonos) esforzándose por emitir el sonido más original y potente. Primero, los participantes hacían un tímido ensayo y explicaban el tipo de grito que bautizaban con diferentes nombres: Vocales, Llamadas a amigos, El número 88, Espanto de toro, Chillido de queja, Felicitación de novios, Olé a la afición... Algunos arrancaron una carcajada del público.
El triunfador de la noche, Andrés Lizarraga, y residente en el barrio madrileño de Estrecho, recibió una ovación y 30.000 pesetas de premio. Lizarraga había participado hace tres años en otro concurso similar y también fue el ganador.
El segundo premio, de 15.000 pesetas, lo consiguió Mari Carmen Pérez, de Villarejo de Salvanés, un ama de casa que se apuntó en el último momento.
Para el tercer premio hubo que hacer un desempate entre Emilia de la Rubia, de 61 años, con Chillido de queja; Juan Antonio Benito, de 32, con Espanto de toros, y Antonio Hernández, de 51, alguacil de Colmenar de Oreja, que consiguió el tercer puesto con el grito María.
El récord mudial de gritos fue conseguido el 9 de septiembre de 1984 en Londres con un alarido de 120 decibelios.
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