Fracasa la marcha contra el campo de tiro del Retín

La convocatoria de la segunda marcha contra el campo de maniobras del Retín sólo consiguió reunir ayer en Barbate (Cádiz) a un centenar de personas. Los manifestantes cubrieron los cinco kilómetros que separan la citada localidad del cortijo de la Casma, centro de las Instalaciones militares, donde entregaron un escrito dirigido al ministro de Defensa, Narcís Serra, en el que solicitan el inmediato desmantelamiento del campo.La Plataforma para el desmantelamiento del Retín, convocante de la manifestación, considera que el campo de maniobras ha ocasionado graves consecuencias para el desarrollo de la comarca. En los últimos dos años, cinco personas han perdido la vida al explotar dos granadas de mano que habían recogido como chatarra.

Ningún papel

La plataforma, en la que están encuadradas algunas organizaciones políticas como el Centro Democrático y Social (CDS), Izquierda Unida y Partido Andalucista, así como el sindicato CC OO, considera que este campo de maniobras "no cumple en absoluto ningún papel para una hipotética defensa de España".Considera, asimismo, que "un tercio de los terrenos de¡ municipio ha pasado a manos militares, lo que frena la expansión urbana de Zahara y Barbate", por lo que entiende que la existencia de este campo "es incompatible con el desarrollo turístico de la comarca". La plataforma convocante asegura que las maniobras militares que allí se efectúan provocan frecuentes incendios forestales que afectan a los bosques de alcornoques de la comarca y ocasionan molestias como ruidos y cortes de carreteras.

La manifestación, que se desarrolló sin incidentes, tuvo también como objeto, según sus organizadores, la protesta porque "se ha destruido todo un sistema económico en el que la agricultura, la ganadería y la explotación del monte habría generado riqueza y empleo".

El campo de adiestramiento M Retín, que ocupa una superficie de 5.255 hectáreas -casi el 40% del término municipal de Barbate- se encuentra situado entre los núcleos urbanos de Barbate y Zahara de los Atunes y es el campo más importante con el que cuenta la Armada española para la realización de maniobras anfibias.

El campo entró en funcionamiento en 1982, una vez expropiados los terrenos, entre los que se encontraban 655 hectáreas de las llamadas Hazas de la Suerte, tierras comunales que cada cuatro años eran sorteadas en parcelas entre los habitantes de Barbate.