El juez Garzón procesa a Artapalo y dicta una orden de captura internacional

El juez Baltasar Garzón acordó ayer el procesamiento del máximo dirigente de ETA, Francisco Múgica Garmendia, Artapalo, por tres atentados cometidos en Madrid por los miembros del comando itinerante. El magistrado también dictó una orden de búsqueda y captura internacional a efectos de extradición contra Artapalo. Éstas son las primeras repercusiones judiciales tras la confesión ante el juez Carlos Dívar de Henri Parot, Unai, uno de los activistas más relevantes del citado grupo.

El juez Garzón procesó también a Parot y a su compañero de comando Jacques Esnal, Jaketx, detenido en Francia, como autores materiales de los tres atentados. Artapalo ha sido procesado como cooperador necesario, ya que proporcionó el material explosivo, documentación falsa y los vehículos utilizados en las acciones por los terroristas franceses.Los tres atentados por los que han sido procesados los etarras fueron cometidos el mismo día, el 17 de mayo de 1987, contra la sede de la Dirección General de la Guardia Civil, y contra los cuarteles generales del Ejército del Aire y de la Armada. En el primero de ellos murió una mujer, Carmen Pascual, y otras cinco personas resultaron heridas. En los otros dos atentados resultaron lesionadas siete personas.

En el sumario por el atentado contra la sede de la Dirección de la Guardia Civil ya estaba procesado Santiago Arróspide Sarasola, Santi Potros, por haber ordenado la acción, suministrado la información y facilitado los documentos falsos utilizados.

Según los autos de procesamiento, Artapalo hizo llegar a Madrid los vehículos cargados con explosivos que Parot y Esnal localizaron estacionados junto a instalaciones del Canal de Isabel II. Las llaves les habían sido entregadas previamente en Francia, por el dirigente etarra. Los activistas distribuyeron los explosivos a razón de unos 80 kilos por cada vehículo y, conducidos por Parot, los situaron junto a los objetivos.

Asesinatos y atentados

Artapalo, Parot y Esnal han sido acusados de un asesinato consumado, cuatro frustrados, tres delitos de atentado, otros tres de estragos, siete de lesiones, robo, tenencia ilícita de explosivos, falsificación de documentos y sustitución de placas de matrícula. Las penas que corresponden a estos delitos exceden los 30 años de prisión, límite máximo de cumplimiento de condena en España. Una copia del sumario ha sido remitida a Francia para que Esnal sea procesado en Francia.El juez ha fijado fianzas que totalizan 155 millones para cubrir las responsabilidades por daños.