El director de la la cárcel de Strangeways teme que haya muertos

El director de la prisión de Strangeways, Brendan O'Friel, teme que "pueda haber muertos" en el recinto, que ayer vivió su cuarto día de asedio. Un número indeterminado de presos sigue controlando un tercio de la cárcel y las autoridades parecen haber optado definitivamente por la paciente espera en vez de por el asalto.

Para O'Friel, los amotinados iniciaron el domingo "una orgía de destrucción" y "una explosión de maldad" que puede muy bien resultar en "el peor incidente de la historia carcelaria británica". Hasta ahora sólo hay un muerto. La víctima era un preso preventivo acusado de delitos sexuales que murió en un hospital de Manchester a consecuencia de la heridas en la cabeza y lesiones internas que le fueron causadas al iniciarse el motín. Uno de los presos evacuados declaró ayer haber visto cuatro ahorcados, pero O'Friel señaló que, mientras no haya pruebas fehacientes, todo lo que se diga sobre esos asesinatos no es sino especulación.

El recinto sigue rodeado de fuerzas antidisturbios, pero Terry Bone, responsable regional del servicio de prisiones, dió ayer la impresión de que las autoridades van a esperar pacientemente a que el frío, el hambre y el cansancio consuman a los amotinados.