Huelga por el Día de la Tierra de los palestinos en los territorios ocupados

El Ejército y la policía de Israel desplegaron ayer un amplio operativo de seguridad para hacer frente a la huelga general convocada por los palestinos, con motivo de la celebración del Día de la Tierra. La jornada comenzó bajo la tensión provocada por la muerte, el jueves por la noche, de un joven palestino de 20 años en el distrito de Ramalá.El joven murió por disparos de soldados israelíes cuando incitaba a la población a rebelarse, según fuentes militares de Tel Aviv.

"Hemos reforzado nuestras tropas, practicamos arrestos entre los sospechosos y reaccionaremos con la mayor energía contra quienes promuevan desórdenes", declaró por la mañana el general israelí Itzjak Mordejai, comandante de la región militar central con jurisdicción en la Cisjordania ocupada.

Mordejai declaró "zona militar cerrada" a Cisjordania, al igual que Gaza, y durante la jornada de ayer los periodistas sólo pudieron entrar en dichos territorios con escolta militar.

Los enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad israelíes se sucedieron por todas partes. En el pubelo de Talbe, 30 kilómetros al noreste de Tel Aviv, las fuerzas de policía emplearon gases lacrimógenos contra los grupos de jóvenes que arrojaron piedras contra los policías y soldados, entre los que resultaron heridos seis agentes, según la radio judía.

Fuentes israelíes informaron que no menos de 6.000 policías fueron movilizados de forma excepcional parta hacer frente a la conmemoración del Día de la Tierra palestina, que fue seguido con una huelga general en Cisjordania y Gaza. En éste último, los habitantes vulneraron el toque de queda impuesto en el territorio.