Sandro Pertini
Se han nublado mis ojos leyendo la muerte de Sandro Pertini. No me avergüenza decirlo, puesto que al reconocer a un hombre, verlo desaparecer, creo haber perdido algo valioso.Miro a mi alrededor y, comparando, me siento deprimido e irritado. Corta es la vida y, sin embargo, son escasos quienes se dan cuenta de lo que es digno de hacer. La honestidad brilla por su ausencia, triunfa la mediocridad y, por ello, no dejo de lamentar la pérdida de este hombre, una especie en extinción.
Cumplió perfectamente su cometido. No sufrió la degradación del poder y del dinero. Fue coherente y perseverante. No importa lo conseguido. Existe, es lo que vale. Descanse en paz Sandro Pertini, un ejemplo de lo que es un hombre-
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