Carrillo declara que su colaboración no interesa a los socialistas
Santiago Carrillo, secretario general del Partido de los Trabajadores de España (PTE) reconoció ayer que el PSOE no tiene ningún interés en la oferta de colaboración en ayuntamientos y autonomías lanzada por su partido. "No lo tiene porque no somos una fuerza electoral que pueda sacarles de un apuro en el Congreso". El PSOE, afirmó, sólo tendrá interés cuando reflexione sobre lo que significan para el futuro de la izquierda los cambios en los países del Este y centroeuropeos, que no son favorables para el triunfo de la socialdemocracia, sino para el triunfo de la derecha internacional. Esta situación exige a su vez la colaboración de todas las fuerzas del arco de izquierdas.Carrillo añadió que han sido esas consideraciones de política internacional, y sus reflejos inevitables en España, lo que ha movido al PTE a lanzar la oferta de colaboración. "Yo creo que la más sorprendida ha sido la dirección socialista, y no esperamos que haya ninguna reacción oficial". [Sin embargo, sí ha habido ya una reacción, de rechazo, informa Luis Miguel de Dios. El ministro de Cultura, Jorge Semprún, declaró ayer en Valladolid: "A Carrillo no le queda más remedio que arrimar el ascua a la sardina o la sardina al ascua, porque si no, ¿qué pinta en la vida política?]".
Santiago Carrillo negó que su partido vaya a integrarse en el PSOE, y afirmó que, desde el punto de vista puramente electoral, la oferta puede interesar a los socialistas en algunos puntos concretos. "En Madrid, por ejemplo, podría haber contactos. Nosotros preferimos a Barranco en la alcadía antes que a Álvarez del Manzano". Carrillo anunció que los contactos informales han surgido ya en algunas ciudades y autonomías, tanto con militantes socialistas como con otros de IU.
Un gran error
Carrillo se mostró convencido de que hay sectores de militantes del PSOE que ya se están planteando estas cuestiones, y que defienden que el partido se abra a la colaboración con otras fuerzas de izquierda y eliminar así la imagen monolítica que ofrece actualmente. "La frase más inteligente que le oído a Benegas es la de que los ministros no deben mostrarse tan susceptibles a las críticas de los militantes. En este sentido, la posible expulsión de Garcia Damborenea me parecería un gran error", añadió.
Carrillo criticó las coincidencias que se están produciendo entre IU y el PP. "A IU hay que presionarla para que abandone su política de catarsis contra el PSOE. Por encima de todas las equivocaciones cometidas por el PSOE, siempre estaremos más cerca de los socialistas que del PP, y, desde luego, IU esta ayudando a que Aznar sea el próximo presidente, no Anguita. A su vez, la presión de la izquierda sería la única forma de conseguir modificar la política económica del PSOE.
