Corterier: "Cada vez es más remota una guerra nuclear o convencional en Europa"

"El proceso actual de desarme hace cada vez más remota la posibilidad de una guerra nuclear o convencional en suelo europeo", declara a EL PAÍS el alemán occidental Peter Corterier, de 54 años, secretario general de la Asamblea del Atlántico Norte, que está en Madrid estos días para asistir al encuentro internacional sobre Cambio y seguridad en la Europa de los noventa, patrocinado por la Universidad Complutense.

Corterier desempeña el cargo desde 1987. En su condición de secretario general de la Asamblea está siendo testigo de primera mano de los vertiginosos cambios en el Este de Europa, de la perestroika y del proceso de desarme y distensión. Como alemán occidental, socialdemócrata, ex diputado y ex secretario de Estado de Exteriores de su país (1981-1982) considera inminente la unificación.Para Corterier, el papel de la asamblea, que se reunirá por primera vez en Madrid en 1991, había sido hasta ahora mantener unidos a los aliados de Europa occidental y a los de más allá del Atlántico, EE UU y Canadá. Sin embargo, desde hace dos años se centra en los contactos con los países del Este. "Queremos compartir con ellos nuestra experiencia en lo relativo al control democrático de las fuerzas armadas y de los presupuestos de defensa. El grado de estos contactos lo da el hecho de que Hungría podría incorporarse muy pronto a la estructura política de la OTAN, y más específicamente a la Asamblea del Atlántico Norte".

Sobre las alianzas militares, Corterier sostiene que el futuro del Pacto de Varsovia es, como dicen los soviéticos, el de una organización política. Ya no será instrumento de dominación en el bloque del Este, sino una organización de Estados soberanos como la OTAN. "Todavía tienen que crear órganos políticos, porque sólo disponen de una estructura militar", dice. "Puede que países como Hungría, Checoslovaquia y Polonia quieran abandonar la organización. Ya veremos qué ocurre después de las elecciones en esos países".

Según él, está claro que la URSS no pretende volver a hacer uso de la fuerza. "Si cualquier país del Pacto de Varsovia decide abandonar la organización, no creo que Moscú pueda impedirlo. Los soviéticos van a retirar sus tropas de Hungría y Checoslovaquia. En Polonia, el tema todavía está pendiente debido al problema fronterizo con Alemania, pero esto va a ser resuelto muy pronto. Una vez que eso ocurra, el Gobierno de Varsovia pedirá a Moscú que retire sus tropas de su territorio". En la República Democrática Alemana (RDA), la presencia soviética continuará durante un período transitorio, según Corterier.

Respecto a las tropas norteamericanas, Corterier afirma que es preciso que continúen en Europa occidental, aunque sea en pequeño número, como muestra del interés de EE UU en la seguridad europea. "No deben retirarse como lo hicieron tras la I Guerra Mundial, con las consecuencias posteriores que todos sabemos".

Mientras tiene sus dudas sobre el Pacto de Varsovia, Corterier asegura que la OTAN todavía va a durar más allá del año 2000. Aún hay problemas peligrosos en Europa, como el nacionalista y si la perestroika va a triunfar o, por el contrario, los conservadores tomarán el poder. "Esperemos que eso no ocurra, pero no hay que descartar la posibilidad", dice. Además, la OTAN es el marco de la presencia norteamericana en Europa. Sin la Alianza esa presencia no tendría razón de ser.

La unificación alemana, preocupante para muchos europeos, no es un tema que deba obsesionar. "El resultado de la unificación", dice, "será una Alemania democrática". Además, continuará como miembro de la CE y de la OTAN. "Esto último quiere decir que nuestras fuerzas armadas seguirán siendo controladas por la Alianza". Afirma que en Alemania no hay ningún grupo de importancia que cuestione las fronteras actuales. "Hay grupos muy pequeños que lo están haciendo, pero la inmensa mayoría de los alemanes del Este y del Oeste reconocen que las fronteras deben mantenerse como están. El tema va a ser resuelto muy rápidamente en las inminentes negociaciones entre la RDA y la RFA.