El Gobierno yugoslavo pide a la población de Kosovo que ponga fin a la revuelta

El levantamiento de los albaneses en la provincia yugoslava de Kosovo, que se inició con una manifestación de 40.000 personas el pasado día 24 en Pristina, produjo ayer dos nuevos muertos por la acción de la policía. El Gobierno yugoslavo hizo anoche un llamamiento urgente por televisión pidiendo a la población "el fin inmediato de todas las huelgas, manifestaciones y cualquier otra forma de violencia" y la iniciación del diálogo. Ésta es la primera reacción oricial a los choques permanentes entre policía y manifestantes, cada vez más agresivos, en las diferentes localidades de Kosovo.

Tras cinco días de escalada de tensiones, con el saldo provisional de más de 14 muertos y decenas de heridos, ayer se levantaron los jóvenes en una docena de pueblos y aldeas de la provincia, que la policía intentó dispersar a lo largo de la tarde y noche con gases lacrimógenos y fuego real.En Podujevo, la policía utilizó un helicóptero para disparar los gases lacrimógenos. Por otra parte, la coalición de tres grupos alternativos -la Asociación para la Iniciativa Democrática Yugoslava, el Comité de Protección de los Derechos Humanos y la Sociedad de Filósofos y Sociólogoscomenzó una campaña de recogida de firmas en el estadio Boro y Ramiz de Pristina, para respaldar su declaración, que exige el cese de los actos de violencia, a la vez que pide la abolición del estado de excepción, la liberación de los presos políticos y la celebración de elecciones libres en la provincia, dependiente de Serbia.

De hecho, parecen perfilarse ya dos movimientos paralelos de los albaneses, uno que lucha por los cambios democráticos en la región por la vía pacífica, encabezado por los intelectuales de prestigio, y otro que ha optado por la violencia y cuyas metas tienen carácter revanchista y nacionalista. Según fuentes de Kosovo, la coalición de los grupos alternativos tiene cierta influencia, pero no está en condiciones de controlar a los jóvenes enfurecidos cuya agresividad se ha ido incrementando.

Ayer se celebró una reunión en el principal diario de Kosovo en albanés, Rilindia, donde se pidió la intervención de la presidencia de Yugoslavia para intentar poner fin a la oleada de violencia que en cualquier momento, si no es frenada, podría desencadenar una guerra civil. Los serbios también amenazan con recurrir a las armas.