La familia Villoslada ha preparado 50 millones para agilizar el pago cuando ETA llame para exigir el rescate

La familia del industrial navarro Adolfo Villoslada, secuestrado por ETA el pasado 24 de noviembre, no ha sido informada aún de la cuantía del rescate que exige la organización terrorista para su liberación, según medios próximos al empresario. No obstante, estas mismas fuentes indican que la familia ha realizado gestiones en torno a parientes, amigos y conocidos, entre otros, para poder desembolsar rápidamente 50 millones de pesetas en cuanto ETA les informe de sus pretensiones económicas.

Esta es la cifra que la familia del industrial podría recabar con "cierta tranquilidad", según medios próximos a Villoslada. Una suma superior, entrañaría, según las fuentes informantes, nuevos esfuerzos y más complejas gestiones. Estas fuentes declinaron indicar por razones de prudencia cuál sería la cifra máxima que podría reunir la familia para pagar la liberación del secuestrado. En medios próximos al secuestrado se informa que la familia Villoslada ha realizado gestiones ante personas que consideraban que podían tener acceso a la organización terrorista Para recabar información.

Todos estos intentos, según esta versión, no han fructificado. La respuesta de estos posibles contactos con ETA ha sido idéntica. "ETA se pondrá en contacto directo con vosotros cuando así lo decida. Hasta entonces, no hablará". Las fuentes informantes especulan que ETA no se pondrá en contacto con la familia antes de un mes por mor de debilitarla psicológicamente al máximo y forzar su predisposición a admitir el pago de cualquier suma, por alta que sea.

En medios próximos al empresario se admite que 50 millones de pesetas, la cantidad ya preparada, es una cifra baja para las habituales pretensiones de esta organización. "ETA no secuestra a nadie por esa cantidad", indicaban medios próximos al empresario. En esta línea, semanas atrás fuentes de la Seguridad del Estado consideraban que no era descabellado pensar que ETA reclamase 500 millones de pesetas. "Luego siempre hay formas de rebajarla o buscar fórmulas de cómodos plazos", explicaban fuentes de la lucha antiterrorista.

La familia del empresario pasó la Nochevieja en su domicilio a la espera de que los secuestradores se pusieran en contacto con ellos para informarles sobre el estado de salud del industrial la cuantía del rescate, según afirmó el portavoz de la familia Villoslada, Ángel Ruiz de Erénchun, informa Europa Press. Los Villoslada no celebraron de modo especial el fin de año y renunciaron a cocinar el plato de cardo al estilo segoviano que suelen degustar en Nochevieja.