Habrá 'carril-bus' en la N-VI entre la carretera de Castilla y Moncloa

La comisión de seguimiento del convenio firmado por el Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo, la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento para mejorar los accesos a la capital decidió ayer adoptar diversas medidas para paliar los efectos de las obras de Cristo Rey. Entre ellas figuran la mejora de la conexión entre la carretera de la Coruña y la carretera de la Playa, la creación de una nueva vía de acceso a través de la Ciudad Universitaria, la instalación de un carril bus en horas punta en la N-VI -en el tramo comprendido entre la carretera de Castilla y Moncloa-, y la canalización del tráfico en la avenida de la Victoria.Aparte de acordarse la supresión de los semáforos de la M-30 y la colocación de un carril-bus en horas punta en la carretera de Extremadura, la comisión decidió agilizar los plazos de terminación de diversas obras. Así para el verano de 1990 estarán en servicio la vía borde de Hortaleza que conectará la N-I (Burgos) con la N-II (Barcelona); el distribuidor Sur que conectará la N-III (Valencia) con la N-IV (Andalucía) y las variantes norte y sur de esta última carretera; el nudo de Puerta de Hierro, el eje Sinesio Delgado, la conexión de Puerta de Hierro con la carretera de la Playa y las obras de la carretera de Castilla. A finales de 1990 se terminarán las obras del Puente de los Franceses.

Otras obras habrán de sufrir un plazo más dilatado. En verano de 1991 podrá abrirse una carretera hacia el aeropuerto desde la vía borde de Hortaleza y en otoño de ese año entrará en funcionamiento el distribuidor Este, que conectará las carreteras de Barcelona y Valencia. A finales de 1991 se terminarán el segundo y tercer tramo de la avenida de la Ilustración; el desdoblamiento de la carretera Alcobendas-Barajas; los carriles reversibles de la carretera de La Coruña -entre el Hipódromo y el cementerio de Las Rozas-, y la ampliación de un carril por sentido entre Las Rozas y Villalba.