Un carril de la N-V, anegado por las lluvias a la altura de Alcorcón

Un carril de la carretera de Extremadura (N-V), en la dirección de salida de Madrid y a la altura de los accesos a Alcorcón, ha permanecido inundado durante más de 24 horas a causa de las fuertes lluvias caídas el pasado martes. Esta situación provocó considerables retenciones de tráfico en una zona habitualmente congestionada. Los usuarios de esta carretera tardaron ayer más de dos horas en hacer un recorrido de apenas 10 kilómetros.

En el tramo de la N-V afectado por las inundaciones se produjo el pasado mes de junio un monumental atasco, como consecuencia de la rotura de una conducción de aguas del Canal de Isabel II que interrumpió el tráfico en ambos sentidos durante casi 12 horas.

A lo largo de la tarde de ayer dotaciones de bomberos y obreros estuvieron trabajando para achicar el agua embalsada en el carril, utilizado normalmente para el paso de autobuses y taxis.

En el barrio de San José de Valderas, en el municipio de Alcorcón, la situación se ha visto agravada por las obras de construcción de nuevos colectores. Muchas de sus calles se han convertido en barrizales. Mientras tanto, la lluvia retrasa la finalización de las obras.

Familia evacuada

Móstoles tampoco se ha visto exento de problemas. En esta ocasión la zona más afectada ha sido la de las márgenes del río Guadarrama, que ha visto aumentar su caudal considerablemente. Junto al río existe una pequeña colonia de casas bajas, la mayoría de construcción ilegal, rodeadas de pequeños huertos. Según fuentes municipales, el pasado día 26, sobre las 9.20 horas, los bomberos de Móstoles tuvieron que desalojar a los seis miembros de una familia que vieron cómo las aguas del río rodeaban su vivienda. Los bomberos tardaron más de dos horas en rescatarlos. Posteriormente los evacuados fueron trasladados a otra vivienda en el barrio de Zarzaquemada, en la vecina localidad de Leganés.Por otra parte, el alcalde de Paracuellos del Jarama, Pedro Antonio Mesa, señaló ayer que el Ayuntamiento proseguía los trabajos para levantar diques de contención del río. En las últimas horas cuatro empresas del polígono industrial de Paracuellos han resultado inundadas por una capa de agua de 30 centímetros de altura. Mesa aseguró que el río, cuyo nivel había descendido, no ofrecía un riesgo inminente de desbordamiento.

Protección Civil mantiene el estado de alerta en toda la Comunidad de Madrid, a pesar de los indicios de disminución de lluvias en los próximos días apuntados por los meteorólogos, informa la agencia Efe.

Mientras tanto, permanece cerrado el puerto de montaña de Navafría y es necesario el uso de cadenas en el de Canencia, según informó el Servicio de Carreteras de la Comunidad de Madrid. El puerto de San Juan también permanece cortado tras haberse producido desprendimientos sobre la calzada.