El crecimiento de la economía española no debe ser inferior al 3,5% anual para que baje el paro, según Julio Segura

Las repercusiones que los cambios tecnológicos y la introducción de nuevas técnicas de producción tienen a corto plazo sobre el factor trabajo para la consecución de unos determinados objetivos de crecimiento de la producción exigen estas magnitudes de incremento del producto interior bruto.Para Julio Segura no se trata solamente de crecer claramente por encima de la media de los países de la Comunidad Europea, de cara a ir reduciendo la distancia que existe entre España y el resto de las naciones de nuestro entorno. Crecer a esas tasas es imprescindible si se quiere generar empleo neto en la economía española, de forma que se pueda cumplir el objetivo de bajar el volumen de paro existente en la actualidad. Y para ello, afirmó, es preciso que el producto interior bruto supere anualmente la tasa del 3,5% porque, de otra forma, las innovaciones tecnológicas permitirán en cada período lograr este incremento de la producción con el mismo volumen de empleo anterior.

Innovación tecnológica

El profesor de Teoría Económica y responsable de la Fundación Empresa Pública, dependiente del Instituto Nacional de Industria, señaló que si bien es relativamente fácil hallar una correlación entre innovación tecnológica y empleo e incluso entre tecnología y salarios reales, no parece tan alcanzable hacer lo mismo entre salarios y empleo, a la luz de las estadísticas actuales y la información de que se dispone. Segura señaló que la innovación tecnológica provoca a corto plazo un efecto de desplazamiento del nivel de empleo necesario que, en cierta medida, se compensa a medio plazo con un proceso de reabsorción del empleo como consecuencia de una mayor producción y un aumento de la demanda. Posiblemente, señaló Segura, en la actualidad una parte del empleo neto generado en los dos últimos años se deba precisamente a este efecto de reabsorción de los cambios tecnológicos que tuvieron lugar hacia la mitad de la actual década.

Algo similar puede estar ocurriendo con las medidas de contención salarial adoptadas hace algunos años como fórmula para salir de la crisis económica. La reducción, o la contención, de los salarios reales tienen unas consecuencias que tardan un cierto tiempo en trasladarse a la economía. Hace falta que pasen dos años para que las dos terceras partes de estas consecuencias se dejen ver y aún es necesario que pase un lustro para que su influencia total se deje sentir. Por eso, sefialó.Julio Segura, es posible que "se haya producido una sobredimensión de las medidas de control salarial que aún no han dejado sentir sus efectos". Era una llamada concreta a que desde las autoridades económicas se dejara de seguir insistiendo en la necesidad de mantener un control salarial.

El III Congreso Nacional de Economía se contó con la presencia de las principales autoridades autonómicas pero con la ausencia, criticada desde la presidencia del congreso, de las autoridades económicas nacionales.