Lineal y circular

El interés del último concierto de la Sinfónica de RTVE, dirigido por su titular, Arpad Joo, se centraba sobre dos puntos: una nueva audición de Chronos, de José Manuel López, y la actuación de Emmy Verhey y Miklós Perenyi en el doble concierto de Brahms Canto de cisne sinfónico del compositor hamburgués. Además, escuchamos la Serenata en re mayor, denominada del Postillón, una de las más bellas de Mozart. Nos llegó en una versión abultada y mezzofortista.Chronos, de José Manuel López (Madrid 1956), se estrenó hace dos años por la ONE, bajo la dirección de José Luis Nemes. Vuelve ahora, cuando el compositor nos ha dado partituras que probablemente la superan. Con todo, y aun cuando no gustara a una parte del respetable., la página se mantiene muy atractiva en sus resultados sonoros -y en su movilidad instrumental y temporal, determinada a aria doble dimensión: lo lineal y no circular. Es un trabajo diestro y válido, por lo que el compositor recogió bastantes aplausos en contraste con algunas protestas.

El doble concierto para violín y violonchelo con el que Brahms pone punto final a su creación orquestal en 1887 tiene, me parece, tres solistas: los instrumentistas y el director; los dos primeros lucieron en esta ocasión,, su altísima categoría, así corno su capacidad para dialogar con voz y matices análogos. Se trataba de los superpremiados Emmy Verhey, holandesa, premio Chaikovski 1966, y el húngaro Miklós Perenyi, premio Casals de Budapest 1963. Están en la plenitud de su carrera. Arpad Joo, siempre seguro, no colaboró en el mismo plano y la orquesta sonó a veces demasiado fuerte y desequilibrada en su relación con los solistas.