Tanteos compradores
Dinero y papel han encontrado cierto equilibrio en la sesión previa a la publicación del IPC de septiembre, con lo que parece que al menos una buena parte del dato que se haga público ya está descontado por los mercados de valores. Los operadores no se ponen de acuerdo, sin embargo, sobre la cifra que puede considerarse como aceptable, es decir, como descontada, por lo que no hay que descartar todavía sorpresas en uno u otro sentido. Aun así, el dinero llevó la iniciativa en muchos corros, haciendo aumentar el volumen del negocio respecto a días anteriores, aunque no se ha abandonado el tono selectivo y las actuaciones puntuales siguen siendo lo más destacado.Los inversores extranjeros también han comenzado a moverse, dirigiendo sus órdenes hacia algunos valores eléctricos y de banca, lo cual animó un cierre que, a primeras horas de la mañana se esperaba apagado. El papel inició un lento repliegue que dejó al descubierto algunas órdenes compradoras, sobre todo en aquellos valores que han descontado sobradamente las declaraciones sobre el incremento de los precios al consumo en el último mes.
Las expectativas se centran en esa vuelta del dinero a los patios de operaciones, lo que serviría para consolidar el nivel de las cotizaciones y alejaría la posibilidad de ruptura de nuevos niveles de resistencia. Por el momento, el índice ha frenado en su goteo a la baja y con un volumen de contratación que garantiza la reacción en el supuesto de que las expectativas sobre un mal IPC no se hayan quedado cortas.
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