Nuñez mantendrá a Cruyff aunque pierda el sábado

Lluís Núñez, el presidente del Barcelona, está dispuesto a mantener en el cargo al técnico Johan Cruyff incluso en el supuesto de que su equipo pierda frente al Real Madrid el sábado en el Camp Nou. La estrategia de Núñez está diseñada para que sea la presión popular -la Prensa y la afición- la que pida la destitución del entrenador holandés.Fuentes próximas al presidente barcelonista manifestaron que éste "tiene las ideas muy claras". "El presidente, desde siempre, daba la imagen de interferir en las labores del entrenador", añadieron; "pues bien, ahora quiere demostrar a todo el mundo lo contrario y descargar la responsabilidad en un cuerpo técnico que, si era válido para la mayoría hace un año, ¿por qué no va a serlo ahora?".

Núñez mantuvo esta tesis el pasado lunes ante sus directivos, muy críticos con la labor de Cruyff, y todos la dieron por válida. Sólo si la derrota frente al Madrid fuera humillante podrían variar los planes del presidente barcelonista. "A grandes males, grandes remedios. Pero no podemos hacer nada hasta que la gente nos lo pida", manifestó uno de los directivos de Núñez, que no se recató en calificar a Cruyff como "Ioco e iluminado".

Molestos

La directiva azulgrana, al margen del tema estrictamente deportivo, está muy molesta con la actitud de Cruyff, que, "en lugar de explicar el lunes las razones de la derrota en Mallorca y la situación real del equipo, se limitó a hablar del asunto de las primas y poco menos que exigir que se resolviera el problema antes de la visita del cuadro madridista".A pesar de la declaraciones de Josep Maria Antrás, portavoz de la directiva, en el sentido de que Ias primas están casi perfiladas y sólo faltan por pulir algunos flecos", las diferencias entre los jugadores y el club son notables. La propuesta de la entidad azulgrana se basa en un incremento de un 7% en los premios por la victoria, el empate y la cantidad global a percibir por la obtención del título liguero. La plantilla desea un 13%, además de doblar las primas por los títulos de la Recopa y la Copa del Rey.

En la temporada pasada, según fuentes próximas a la directiva, los jugadores tenían unas primas de 250.000 pesetas por partido ganado y de 125.000 por el empatado, así como un premio especial y global para toda la plantilla de 120 millones por la consecución de la Liga, de tres millones por la Recopa y de 2,5 por la Copa.

El deseo de Cruyff es que todo quede resuelto antes del sábado, pero las conversaciones podrían dilatarse quizá porque la directiva podría ultizar como arma el tema en el supuesto de que se produjese una derrota frente al equipo dirigido por el galés John Benjamín Toshack.

La plantilla vuelve hoy a la actividad después de descansar ayer, aunque alguno de sus componentes, como José María Bakero, se entrenó por su cuenta. Bakero aseguró ayer que podría estar en condiciones de alinearse bastantes minutos frente al Madrid. Así, el delantero vasco sería una de las sorpresas de Cruyff, que lo considera tan imprescindible como el defensa Alexanco.