_
_
_
_
Entrevista:

Gil-Robles: "El español se resigna ante el poder"

El defensor del pueblo cree que algunos ayuntamientos confunden autonomía con autocracia

Álvaro Gil-Robles, defensor del pueblo, retoma ahora con su equipo, tras un mes de descanso, esa labor que ocasionalmente le lleva a sentirse un "desfacedor de entuertos que todo lo puede". Aunque los españoles le dirigen más de 13.000 quejas anualmente, aún cree que sus compatriotas se quedan cortos: "Los españoles somos muy resignados ante el poder, ante la Administración". Y estima que el poder más opresivo y que más excesos comete se asienta en los pequeños ayuntamientos, en los que, "algunos confunden autonomía local con autocracia o alcaldada".

Más información
"No hay quejas nimias"

Pregunta. ¿En el año y medio que lleva como Defensor del Pueblo qué impronta ha conseguido dar a esta institución?Respuesta. El balance de este año y pico sería positivo y al mismo tiempo esperanzador. Hemos intentado seguir el impulso dado a esta institución por el anterior equipo, del que yo formé parte, y empezar a divulgar la idea del Defensor del Pueblo para intentar apartarla de la parte que siempre va unida a esta institución que tiene el atractivo título de Defensor del Pueblo, un poco confuso para mucha gente. Intentanlos aclarar qué es lo que podemos hacer y qué es lor que no podemos hacen y orientar a la gente para que nos escriba sólo sobre los temas de nuestra competencia. Como es positivo haber conseguido un cierto cambio de la Administración pública, que ha pasado de ver con escepticismo esta institución a considerar que tiene un papel constitucional y que hay que trabajar en serio con ella en razón a lospropios intereses de los ciudadanos.

Papel definido

P. ¿Qué metas se ha fijado hasta el fin de su mandato?

R. Me daría por satisfecho si al terminar estos cinco años realmente la institución fuese perfectamente conocida y sentida como algo propio por los españoles, no como,algo lejano o burocrático. Y, al, mismo tiempo, que se hubiese consolidado totalmente en sus relaciones con las Administraciones y que no hubiese ya discusión no sólo en cuanto al papel positivo en ayudar a resolver casos individuales, sino también a cambiar nuestra desde el fondo y Administración acambiar las normas que es preciso cambiar.

P.¿Ha disipado ya, las reticencias que su nombramiento despertó en la oposición por su proximidad al PSOE?

R. Creo que sí, aunque comprendo que se puedan tener dudas y reticencias. Pero eso no me ha condicionado. Empecé a trabajar sin pensar en ello dos veces. Y me puse a hacer lo que tenía que hacer, y a decir lo que tenía que decir y, en algunos casos, a no decír lo que algunos querían que dijese. Ha habido unanimidad de los grupos parlamentarios en felicitar al Defensor del Pueblo por su ecuanmudad, independencia y rigor.

P. ¿El Gobierno superó su sorpresa de que saliera tan díscolo?

R. No tengo la sensación de que el Gobierno piense que soy díscolo. Creo, simplemente, que todas las instituciones tienen que cumplir su papel constitucional. Nuestro papel es especialmente complicado, no sólo por su novedad, sino porque está configurado para recibir las quejas de los ciudadanos, no los parabienes, sobre lo que entienden que funciona mal en la Administración. Y, claro, no es grato escuchar 16 que va mal.

P. Su informe sobre las urgencias hospitalarias levantó ampollas en el Gobierno.

R. Aquel informe respondía a una realidad, y estaba balanceado. Había hospitales que estaban bien y otros que no estaban tan bien. El hecho de que no estabamos tan descaminados en lo que decíamos lo prueba que la respuesta del ministro de Sanidad fue poner en marcha inmediatamente las reformas necesarias.

Expulsiones irregulares

P. ¿Persisten las expulsiones irregulares de extranjeros?.

R. Deberíamos ser más generosos en la aplicación de la ley de extranjería, sin necesidad de cambiar nada. Son personas con los que en muchos casos hay que tener, una cierta consideración por los años que han pasado entre nosotros, las raices que han establecido, el. trabajo que, han dedicado a la sociedad española, etc. Y, sin entrar en el ánimo de la aplicación de la ley, pediría que,se respete él procedimiento legal de expulsión,plazos, posibilidad de recurrir y de ser informado para defenderse.

P. ¿Son resignados los, españoles ante el poder?

R. Que los españoles somos, muy resignados ante el poder, ante la Administración es evidente, aunque se va tomando ya conciencia de los derechos y deberes. Pero es verdad que el español tiene resignación ante el poder, sobre todo en el ámbito rural no sea que se enfade don fulano.

P. ¿Creo que la autoridad. local es la más opresiva?

R. Es que es la administración más cercana, la más directa. Son 8.000 pequeños gobiernos. Y algunos confunden autonomía local con autocracia o alcaldada. En el aparato del estado siempre es fácil encontrar una última autoridad que rectífica a la anterior. Es la administración más dura para el ciudadano porque es casi personal, en muchos pequefios municipios, donde el ayuntamiento es don fulano para el vecino.

P. A esto se une la maraña de competencias, que impide deteriminar qué administración responsable de un desaguisado.

R. Es uno de los problemas que quiero trabajar. En este país no existe la coordinación entre las administraciones. Amparados mqúe su,competencia llega hasta aquí, perviven situaciones de ilegalidad flagrante en España años y años.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_