Segurado, a favor de una mayor privatizacion en los sectores financiero y de transportes

José Antonio Segurado, vicepresidente del Partido Popular encargado de los asuntos económicos, propugnó ayer la necesidad de desarrollar una política de privatizaciones en los sectores financiero, transportes, comunicaciones y agroalimentario, según informa EFE. Segurado se mostró también partidario de efectuar una revisión al alza del IVA y rebajar otros impuestos.El dirigente popular calificó las recientes declaraciones del ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, de "triunfalistas y frívolas", le acusó de "no valorar nunca los grandes desequilibrios" al despreciar los desajustes de la inflación y del sector exterior y criticó que el único compromiso adquirido ayer por el ministro fuera el de realizar un presupuesto equilibrado.

Segurado, que hizo estas manifestaciones en una conferencia de prensa, dijo que su partido está convencido de que "existe una política económica radicalmente distinta a la del PSOE" que va a permitir "crear un sistema económico competitivo, crear riqueza, y liberalizar la economía".

En su opinión el objetivo prioritario de la próxima legislatura es liberalizar el sistema económico y afirmó que tenía que terminar "el proceso intervencionista en sectores como el financiero, el de transportes y comunicaciones y agroalimentario.

El vicepresidente del Partido Popular propuso una reforma fiscal que libere recursos del sector público al privado a través de la rebaja de impuestos, de la supresión de la obligación de declarar en algunos tramos de la renta y otras medidas que irían acompañadas de un alza de impuesto, sobre el valor añadido. "No puede ser -dijo- que el sector público estar manejando el 42% de la riqueza nacional".

Explicó que el compromiso es no rebasar la actual carga inipositiva situada, según sus datos, en un 33% del Producto Interior Bruto. Se comprometió también a reducir el gasto público, que calificó de "auténtico cáncer de la economía" a través de la supresión de gastos de libre disposición en todos los ministerios, excepto en el de Interior. Se mostró también partidario de reducir a uno o dos por departamento el número de asesores de los ministros, así como la absorción de algunos ministerios innecesarios "algunos de ellos de reciente creación". También se pronunció a favor de una política de rentas y de concertación social a través del diálogo entre la patronal y los sindicatos con una mínima intervención del Gobierno.