¿Crisis en el cine?
Domingo 6 de agosto de 1989. Cine Palacio de la Música, en la Gran Vía madrileña (¿cine de primera categoría?). Película en cartel precedida de una gran publicidad. Patio de butacas lleno a rebosar. Precio único: 500 pesetas. Proyección escasa de luz y amarillenta. Imagen desenfocada en los laterales. Sonido bajo de volumen y sin calidad (se pierde parte del diálogo). Doblaje defl ciente. "Refrigeración" que pro duce constantes sudores en losespectadores. Butaca.,; sucias, deterioradas e incómodas.Como amante del (,-ine que soy, me siento estafado y me reafirmo en la idea de que es mejor ver cine en televisión que visitar ciertas salas de exhibicion, que lo único que hacen es agravar más la situación de esta industria, y hundirla cada día más para los buenos aficionados especialmente-
