Los ministros de Finanzas de la CE aprueban el calendario para la unión monetaria

"Los ministros de Economía y Finanzas de la CE, presididos por el francés Pierre Bérégovoy, aprobaron ayer en Bruselas el calendario de decisiones para poner en marcha la primera fase de la unión monetaria y preparar la conferencia intergubernamental que garantizará el resto del proceso.

El compromiso incluye tomar decisiones políticas en la cumbre de Estrasburgo, el 8 y 9 de diciembre próximos. En referencia a la situación de la economía española, el ministro Carlos Solchaga afirmó que, si persiste el desequilibrio provocado por el repunte de la inflación y el déficit comercial, "el Gobierno no vacilará en introducir nuevas medidas restrictivas de carácter monetario y fiscal".El Consejo de Ministros de ayer, el primero del semestre bajo presidencia francesa, muestra la voluntad de Francia de p'isar el acelerador para poner en práctica el compromiso sobre unión económica y monetaria alcanzado por los doce en la cuznbre de Madrid. El objetivo es que en diciembre, el Consejo Europeo de Estrasburgo dé el visto bueno a las medidas necesarias para el comienzo de la primera fase, previsto a partir de julio de 1990. De esta forma, los Estados miembros dispondrán de seis meses para realizar ajustes internos.

Antes de fin de mes, la comisión europea está obligada a presentar las propuestas para adecuar los acuerdos comunitarios de 1964 y 1974. El debate se llevará a cabo en el consejo informal de finanzas que tendrá lugar en Antibes (Francia) el 9 y 10 de septiembre. Las medidas serán sometidas el 27 de noviembre a la aprobación de los ministros de Asuntos Exteriores y, el 8 y 9 de -diciembre, a la ratificación de los jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad. Los titulares de Finanzas aún tendrán oportunidad el 18 de diciembre de desarrollar esos acuerdos.Más importancia que las decisiones sobre la primera fase tiene el consenso alcanzado para elaborar la lista de temas preparatorios de la conferencia intergubernamental, a la que corresponderá definir el alcance de la reforma de los tratados de la CE para llegar al objetivo final de una moneda única y un sistema federal europeo de bancos centrales. La comisión europea presentará sus propuestas en septiembre, que pueden ser completadas con los puntos de vista de cada país.

La determinación francesa de desarrollar sin retrasos los cuatro puntos del acuerdo de Madrid fue asumida por todos, aunque el ministro británico, Nigel Lawson, no ocultó su escepticismo sobre la totalidad del proceso y puso en duda que exista una base democrática suficiente en la CE para realizar el profundo cambio de soberanía que implica la unión económica y monetaria.

Inversión satisfactoria

En el análisis de la situación económica, los doce expresaron su satisfacción por la buena marcha de la inversión, el ritmo de la producción y la generación de empleo en la Comunidad. Aunque las previsiones de crecimiento se han visto superadas, subsisten sin embargo signos preocupados co mo el repunte de la inflacción y los desequilibrios entre las balanzas de pagos. La RFA no dio su brazo a torcer para incentivar su demanda interna. La pretensión es que elimine subvenciones intemas y aumente sus importaciones a fin de paliar el desequilibrio en los países a los que dirige sus exportaciones crecientes.

Carlos Solchaga explicó a sus colegas las medidas adoptadas en España para hacer frente a la inflación y corregir el fuerte desequilibrio de la balanza comercial. "El recurso a los coeficientes bancarios", dijo, "no va a desaparecer y es un campo que quedará al albedrío de cada país". Y aunque añadió que "no se sabe si la CE hará perder libertad en materia de restricciones en las rentas de capital", mostró su convicción de que las correcciones operadas son adecuadas, en una mezcla dirigida a que "la política fiscal no vaya contra la monetaria".