Prima Inmobiliaria podrá ejercitar la compra de los bienes de los Coca por 14.500 millones de pesetas
Prima Inmobiliaria, sociedad controlada por el grupo KIO, estará en condiciones de adquirir los bienes de la familia del banquero fallecido Ignacio Coca a partir del día 13 de julio próximo. El precio convenido de la operación es de 14.500 millones de pesetas, de acuerdo con los convenios suscritos a mediados de septiembre, cuando Prima avaló a los Coca en el crédito puente por valor de 12.000 millones de pesetas concedido por el Banco Santander para que los herederos del banquero Coca pudieran saldar sus deudas con el Banco Español de Crédito, entidad presidida por Mario Conde.
La familia Coca no ha encontrado todavía un comprador que satisfaga sus intereses. Si Prima ejerce su derecho preferente, la operación reportaría a los Coca un beneficio de 500 millones, ya que el reembolso efectivo del crédito al Banco Santander alcanza 14.000 millones, incluyendo intereses.La familia Coca lleva ya casi dos años buscando un comprador para sus activos inmobiliarios de Marbella, que incluyen el hotel Los Monteros, la clínica Incosol y el campo de golf Río Real. La imposibilidad de realizar estos bienes fue precisamente la que provocó la apelación al crédito puente del Banco Santander el 13 de septiembre pasado. De lo contrario, las propiedades de Marbella habrían pasado directamente a Banesto como pago por la deuda contraída con la entidad presidida por Mario Conde y que fue fijada en 11.500 millones de pesetas.
Avalistas
El Banco Santander aportó 12.000 millones de pesetas a un tipo de interés superior al 16% más una comisión de apertura del 1,5%. Al mismo tiempo, la entidad financiera solicitó un avalista; papel asumido por Prima Inmobiliaria gracias a la mediación de la sociedad Ibermer, participada por Enrique Sarasola, ante el socio de KIO en España, Javier de la Rosa.El contrato a tres bandas -familia Coca, Banco Santander y Prima Inmobiliaria- fija ba un plazo de amortización de 12 meses, que vence el próximo 13 de septiembre, si bien Prima Inmobiliaria disponía de una opción preferente de compra que podía ser ejercitada a partir del 13 de julio y durante un período de cinco meses, hasta el 13 de enero de 1990. En estas condiciones, los herederos de Ignacio Coca tienen en su mano la posibilidad de solicitar de Prima Inmobiliaria un aplazamiento en el ejercicio de su opción de compra, pero desde el punto de vista estrictamente jurídico no es menos cierto que la filial de KIO puede perfectamente asegurar la propiedad de estos activos en menos de tres semanas.
Así y todo, lo más lógico es que Prima Inmobiliaria adapte sus objetivos a los intereses dela familia Coca. De lo contrario, su mediación como avalista en la operación habría perdido su sentido original, que no fue otro que facilitar la culminación de negociaciones -contencioso aparte- de los herederos del banquero fallecido con Banesto.
Experiencia
En este tipo de cometidos, la inmobiliaria de KIO ha alcanzado ya una importante experiencia. No en vano fue Prima la que corrió hace poco con el riesgo de encontrar un comprador para los activos inmobiliarios de la sociedad Ercros, resultado de la fusión entre Explosivos Riotinto y Cross.
Una vez más, la mediación de Javier de la Rosa fue decisiva para que los directivos de la inmobiliaria aceptaran, más bien a regañadientes, la compra de unos activos, que posteriormente han sido traspasados a terceros sin ningún beneficio efectivo.
Sin embargo, la adquisición a Ercros ha permitido a esta última empresa unos beneficios atípicos del orden de 10.000 millones de pesetas, que serán contabilizados al cierre del presente ejercicio.
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