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Fóley, nuevo 'speaker' de la Cámara de Representantes

La elección cantada el martes de Thomas S. Foley, un abogado católico de 60 años y diputado demócrata por el Estado rural de Washington, como 49º speaker (presidente) de la Cámara baja del Congreso de Estados Unidos no ha servido para reducir el clima de tensión que rodea desde hace meses a la institución parlamentaria norteamericana y que culminó el jueves 1 con la dimisión del anterior speaker, Jim Wright.

Foley fue elegido para el cargo legislativo más importante del país -que también lleva implícita la sucesión en segundo lugar a la presidencia de Estados Unidos- por 251 votos frente a los 164 conseguidos por su contrincante nominal, el líder de la minoría republicana, Robert Michel.El resultado refleja no sólo la abrumadora mayoría demócrata en la Cámara de Representantes en su actual sesión sino el dominio ininterrumpido de la misma por parte de los demócratas en los últimos 35 años.

La misma mañana de la elección del speaker, y para que no hubiera duda del curso futuro de los acontecimientos, en el comité nacional del Partido Republicano circuló un documento en el que se acusaba a Foley de ser un "ultraliberal" y no un moderado, al tiempo que pretendía, en un ejemplo de juego sucio, equiparar su historial de votaciones en la Cámara con el del campeón de la causa gay en el Congreso, el demócrata de Massachusetts Barney Frank.

El documento fue condenado como difamatorio por varios diputados republicanos empezando por el propio Michel, pero la estrategia del aparato del partido quedaba clara. Incluso en un elogioso discurso de salutación a Foley, Michel aprovechó para atacar duramente a la mayoría demócrata del Congreso, "una situación", dijo, "que no supone un derecho divino, como la de la minoría (republicana) no supone una situación permanente".

Postura de los republicanos

Los republicanos, manifestó Michel, están dispuestos a colaborar en el restablecimiento de una cooperación bipartidista en la Cámara, "pero no a costa de ocultar el polvo debajo de las alfombras", una clara alusión a las dimisiones del speaker Wright, antes de que la Comisión de tica se pronunciara sobre la posible violación, en 69 ocasiones, de las normas de conducta del Congreso, y del portavoz del grupo parlamentario demócrata, Tony Coelho, antes de que se iniciara una investigación por una operación financiera considerada como dudosa.Michel utilizó una frase de Wright en su discurso de dimisíón para defender las investigaciones sobre transgresiones éticas de los miembros de la Cámara.

Se ha hablado de "canibalismo insensato", dijo Michel. "Pero conviene recordar que el comité de ética de esta Cámara no está formado ni por insensatos ni por caníbales", dijo. Wright es el primer speaker de la Cámara que dimite por razones éticas en la historia pariamentaría norteamericana.

Persiste la desconrianza

La opinión general reinante ayer en Washington era que Foley, a pesar de su indiscutible veteranía parlamentaria, tendría. que emplearse a fondo para conseguir superar el actual clima de desconfianza entre los dos partidos del arco parlamentario.El actual speaker, el 492 que elige la Cámara desde que Frederick Muhlenberg jurara. su cargo hace 200 años, es considerado un experto en el compromiso parlamentario. Pero esta habilidad puede resultar un handicap más que una virtud en las actuales circunstancias.

El portavoz demócrata dimisionario, Tony Coelho, ha calificado a Foley como "guante de terciopelo, cuando lo que ahora se necesita es un puño de hierro".

La cúpula parlamentaria demócrata será completada en una elección entre los dipul:ados del grupo el próximo martes.

El ex-candidato a la designación demócrata a la presidencia en las últimas elecciones y diputado por Missouri, Richard Gephart, es el favorito del partido para convertirse en nuevo líder de la mayoría en sustitución de Foley.

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