Renfe debate alternativas de gestión ante la repercusión económica de los paros

Los responsables de Renfe estudian diferentes alternativas para intentar paliar la repercusión de las huelgas sobre los resultados de explotación de la compañía, según aseguran fuentes de la propia empresa. El pasado martes, el presidente de Renfe, Julián García Valverde, mantuvo una reunión con todos los directores de zona de la empresa en la que expuso la situación creada por el enfrentamiento con las organizaciones sindicales e invitó a los directivos a proponer soluciones.

Por otra parte, los sindicatos mantienen las convocatorias de huelgas y paros parciales convocados para mayo y junio tras concluir sin acuerdo la reunión que mantuvieron con la dirección de la empresa en la madrugada del jueves para tratar de desbloquear las negociaciones del convenio colectivo. Según manifestó el portavoz del comité intercentros, el único punto de coincidencia entre sindicatos y empresa fue fijar en dos años la vigencia del convenio causa de desacuerdo. Las organizaciones sindicales reivindican un incremento salarial del 6,5%,con revisión salarial y vigencia por dos años. Por su parte, la empresa llegó a ofrecer el 5,75% de incremento supeditado a la desconvocatoria de los paros. Al mantenerse los mismos, la oferta fue retirada.En la reunión de directores de zona, según fuentes de la propia empresa, "se habló sin tapujos" y se llegó a mencionar la posibilidad de llevar a cabo un cierre patronal, "simple hipótesis" en palabras de un alto cargo del Ministerio de Transportes, "casi una broma" asegura uno de los participantes en la reunión. La medida fue finalmente descartada.

Debate interno

Tras la reunión, afirman fuentes de Renfe, se ha abierto un debate interno sobre las posibles medidas a adoptar, "con la idea de introducir modelos de gestión privados en una empresa pública, hallar las razones de que el producto final no funcione cuando sí lo hace en otros países del entorno e intentar poner freno a las pérdidas que están provocando las huelgas".Según la empresa, tales pérdidas ascienden a unos 2.500 millones de pesetas en los meses de marzo y abril. Entre las hipótesis que en estos momentos se debaten en la dirección de Renfe, siempre según fuentes internas de la propia compañía, se encuentra el hipotético cierre de algunas líneas y la división en dos de la empresa: por una parte las líneas de cercanías (con especial atención a Madrid y Barcelona) y por otra, las de largo recorrido.